Venerable
Bartolomé Holzhauzer
(1613-1658)
El Venerable Bartolomé Holzhauser, después de predecir la Revolución Francesa,
Napoleón y su caída, dice:
"En medio de esto, la paz no se habrá aún restablecido definitivamente, pues de todos lados conspirarán los pueblos en favor de la república. Y así se verán todavía terribles calamidades por todas partes: la Iglesia y sus ministros serán hechos tributarios; los príncipes serán derribados; los monarcas, muertos y sus vasallos entregados a la anarquía. El Omnipotente, entonces, intervendrá con un golpe admirable que nadie en el mundo puede imaginarse. Y aquel poderoso monarca que debe venir de la parte de Dios reducirá a nada la república, subyugará a todos sus enemigos, destruirá el imperio de los franceses, y reinará de Oriente a Occidente. Lleno de celo por la verdadera Iglesia de Cristo, unirá sus esfuerzos a los del futuro Pontífice por la conversión de los infieles y herejes. Bajo semejante Pontífice será menester que el reino de Francia y las otras Monarquías se pongan de acuerdo después de las sangrientas guerras que las habrán desolado, y que, bajo la dirección de aquel gran Papa, emprendan la conversión de los infieles. Y así todas las naciones vendrán a adorar al Señor su Dios" En la interpretación del Apocalipsis, cap. II, versículos 7 al 13, dice:
"Porque si bien en la quinta
edad no vemos por todas partes sino las más deplorables calamidades; devastado
todo por la guerra; oprimidos los católicos por los herejes y malos cristianos;
la Iglesia y sus ministros hechos tributarios; trastornados los reinos, muertos
los monarcas, atormentados los vasallos y conspirando todos los hombres por
erigir repúblicas; se hace un cambio admirable, por la mano de Dios
Todopoderoso, tal que nadie pueda humanamente imaginárselo. Pues este monarca
poderoso que vendrá como enviado de Dios, destruirá las repúblicas hasta los
cimientos, someterá todo a su poder y empleará su celo en favor de la verdadera
Iglesia de Cristo. Todas las herejías serán relegadas al infierno. El
imperio de los turcos será destruido y aquel monarca reinará de Oriente a Occidente..."
(S. M. Mirakles, pág. 48; M. Servant, pág. 277).
Todavía sobre el Castigo:
"Durante tres días, la tierra será sumergida en la obscuridad más completa; como antaño en Egipto, el Ángel Exterminador abatirá todos aquellos que se han levantado con odio satánico contra la Iglesia y los sacerdotes" (M. Servant, pág. 376)