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martes, 25 de febrero de 2020

MEDITACIONES: Miércoles de Ceniza


Meditación
Por el P. Alonso de Andrade
De cómo Cristo se despidió de Su Santísima Madre, para ir a padecer muerte y  pasión.

   San Buenaventura en las meditaciones de la vida de Cristo llegando a su sagrada Pasión comienza por esta.

   Punto I.- Considera la obediencia que mostró Cristo en esta acción a su eterno Padre dejando madre, parientes y discípulos para ir a ejecutar su mandado, y el respeto que tuvo a Su Santísima madre, tomando primero su bendición para ir a padecer y morir por el género humano, en que debes aprender a dejar padres, hermanos, parientes y amigos por obedecer a Dios cuando fuere necesario para ejecutar su mandato, y juntamente el respeto que debes guardar a los padres naturales, no haciendo cosa alguna si tomar su bendición. Pide a Cristo que te dé gracia para seguir sus pisadas e imitar su ejemplo, para que sepas agradarle en todo, cumpliendo con tu obligación.

   Punto II.- Considera que, como dice San Buenaventura, estando Cristo el miércoles antes de su Pasión en Betania, en casa de Santa María Magdalena y Santa Marta con su Santísima madre, se retiró con ella y sentados a solas, le dijo con tan pocas cuanto sentidas palabras, cómo se había llegado ya el tiempo de su muerte y pasión, lo cual pasaría en breve; que tuviese paciencia y le diese su bendición y licencia para ir a padecer y obedecer a su Eterno Padre que así lo había ordenado, y que se consolase porque dentro de pocos días le volvería a visitar resucitado y glorioso. Contempla el cuchillo de dolor que atravesaría el corazón de la madre, oyendo tales palabras de su Santísimo Hijo, y cómo ofrecería al Eterno Padre con prontísima obediencia aquel sacrificio, rindiéndose a su eterna y divina voluntad. Enmudecería la lengua y hablarían los ojos con tiernas lágrimas nacidas de su dolorido corazón. No las dejes caer en tierra sino recógelas en el tuyo y mira a los dos amantes llorando lágrimas vivas por tu amor, hablándose los corazones y conformándose íntimamente con la voluntad de Dios. Compadécete de su dolor y aprende a conformarte en tus acaecimientos con la voluntad de Dios, y ofrécete al Hijo benditísimo y a la Santísima  Virgen a padecer por Él.

   Punto III.- Considera lo que dice San Buenaventura, que estando Cristo con su Santísima madre, entró Santa María Magdalena y le rogó que se quedase en su casa a celebrar con sus discípulos aquella Pascua; y que el Salvador le respondió que no podía dejar de subir a Jerusalén a celebrarla, y entonces dijo la Santa a nuestra Señora que fuesen todos a acompañarle y a celebrarla en su compañía, y que lo hicieron así como lo dijo. Contempla el amor tan fino de esta sierva del Señor que nunca le permitió apartarse de su compañía; mira el afecto con que le ofreció su casa, y ofrécele tú la tuya y tu corazón y tu alma para morar en ella, y ruégale con toda la instancia posible que no te deje por indigno y que reciba tu oferta y entre en tu pobre casa.

   Punto IV.- Considera cómo declaró a Santa María Magdalena el secreto de su Pasión y cómo se despediría de ella y de su hermana Marta y de las otras santas mujeres que le seguían, y se las encomendaría a su madre, y a ellas también que consolasen y asistiesen a la Virgen a quien dejaría juntamente el cuidado de su iglesia. Y Cristo se despediría de ellas dándoles su santa bendición.

   No dejes ir a Cristo sin que te bendiga a ti también.

martes, 18 de febrero de 2020

LOS CATÓLICOS LIBERALES "SON MUCHO MÁS PELIGROSOS Y FUNESTOS QUE LOS ENEMIGOS DECLARADOS": S.S. PÍO IX



El 17 de septiembre de 1861 después del decreto relativo a la canonización de los veintitrés mártires franciscanos del Japón, dijo S.S. Pío IX lo siguiente: "En estos tiempos de confusión y desorden, no es raro ver a cristianos, a católicos –también los hay en el clero- que tienen siempre las palabras de término medio, conciliación, y transacción. Pues bien, yo no titubeo en declararlo: estos hombres están en un error, y no los tengo por los enemigos menos peligrosos de la Iglesia… Así como no es posible la conciliación entre Dios y Belial, tampoco lo es entre la Iglesia y los que meditan su perdición. Sin duda es menester que nuestra fuerza vaya acompañada de prudencia, pero no es menester igualmente, que una falta de prudencia nos lleve a pactar con la impiedad… No, seamos firmes: nada de conciliación; nada de transacción vedada e imposible".


El mismo Pío IX dirigió al presidente y socios del Círculo de San Ambrosio de Milán el 6 de marzo de 1873, el siguiente mensaje: "Si bien los hijos del siglo son más astutos que los hijos de la luz, serían sin embargo menos nocivos sus fraudes y violencias, si muchos que se dicen católicos no les tendiesen una mano amiga. 

Porque no faltan personas que, como para conservarse en amistad con ellos, se esfuerzan en establecer estrecha sociedad entre la luz y las tinieblas, y mancomunidad entre la justicia y la iniquidad, por medio de doctrinas que llaman católico-liberales, las cuales basadas sobre principios perniciosísimos adulan a la potestad civil que invade las cosas espirituales, y arrastran los ánimos a someterse, o a lo menos, a tolerar las más inicuas leyes, como si no estuviese escrito: ninguno puede servir a dos señores. Estos son mucho más peligrosos y funestos que los enemigos declarados, ya porque sin ser notados, y quizá sin advertirlo ellos mismos, secundan las tentativas de los malos, ya también porque se muestran con apariencias de probidad y sana doctrina, que alucina a los imprudentes amadores de conciliación, y trae a engaño a los honrados, que se opondrían al error manifiesto. "(…) 

San Ezequiel Moreno: Yo, haciendo mías las palabras de Pío IX, y aplicándolas a nuestra actual situación, concluyo este apartado diciendo: Nos hallamos en días de confusión y desorden, y en estos días se han presentado hombres cristianos, católicos –también un sacerdote- lanzando a los cuatro vientos palabras de término medio, de transigencia, de conciliación. Pues bien, yo tampoco titubeo en declararlo: esos hombres están en un error, y no los tengo por los enemigos menos peligrosos de la Iglesia. No es posible la conciliación entre Jesucristo y el diablo, entre la Iglesia y sus enemigos, entre catolicismo y liberalismo. No, seamos firmes:
nada de conciliación; nada de transacción vedada e imposible. O catolicismo o liberalismo. No es posible la conciliación.” Por algo el Syllabus del mismo Papa Pío IX condenó la proposición (LXXX) que decía que la Iglesia -a través del Romano Pontífice- debía reconciliarse con el liberalismo. Sin embargo, hoy en día, los modernistas resucitan y practican este viejo y sobado error, y lo enarbolan como bandera de dizque "progreso", cuando en realidad todos los viejos errores son retardatarios.

Tomado de Catolicidad (9 de agosto 2012)
(Énfasis, Edición del Ariete Catolico)

domingo, 16 de febrero de 2020

CARTA ABIERTA A LOS FIELES DE LA FSSPX: Catholic Candle


N de B: Publicamos esta valiente carta firmada por varios católicos firmes e intransigentes que rechazan el liberalismo de la nueva FSSPX y de la iglesia conciliar. El Ariete Católico se une a los signatarios de esta carta. Los principios, que nos motivan a defendernos de este liberalismo, deben ir acompañados de acciones concretas, no teóricas, retóricas, mediáticas ni golpes al aire. 

Como buenos católicos en defensa de la Fe y de la Iglesia Católica tenemos el deber ineludible de apartarnos de aquellos que ya no luchan por el reinado social de Nuestro Señor Jesucristo. Los amigos de los enemigos de Cristo están dispuestos a seguir esparciendo su veneno liberal con máscara de tradicionalismo. Este es el momento decisivo, con Cristo o contra Cristo. Las posturas firmes del católico con convicción son vistas por algunos católicos tibios como acciones exageradas, pero en cuestiones de la defensa de la Fe nunca se exagera. ¿Qué diferencia hay entonces entre la nueva FSSPX y la Fraternidad San Pedro? Nada, sólo la retórica: dicen que no han firmado nada aún, pero son tan amigos de los conciliares tanto los unos como los otros. 
¡Santa María de Guadalupe ruega por nosotros!


".. nos negamos a asistir a cualquier actividad de la FSSPX. Tratamos a la FSSPX como el grupo de indulto/liberal que se ha vuelto. Sólo vamos a Misa y recibimos los Sacramentos de sacerdotes que se levantan en contra de ese liberalismo que la FSSPX ha abrazado progresivamente. Escogemos la obediencia a la Fe Católica, antes que a cualquier colaboración en la destrucción de la Fe.."


Carta Abierta a los Fieles de la FSSPX

Para: Los fieles que van a las Misas de la FSSPX
De: Soldados de Cristo (firmando abajo) que han cortado los lazos con la “Neo-FSSPX”

Escribimos para explicar por qué ya no vamos a las Misas de la FSSPX y no los apoyamos de alguna manera, ya sea moral o económicamente. Escribimos para explicar nuestra decisión, que hicimos después de mucha reflexión, oración y habiendo recibido buen consejo, esto durante un largo periodo de tiempo.

Les explicamos nuestra decisión porque deseamos evitar causar escándalo (concerniente a las razones por las cuales nos fuimos) y también para exponer nuestras razones por las cuales ustedes deberían actuar de igual manera. Sin embargo, no estamos poniendo un juicio con respecto a la culpabilidad subjetiva de aquellos que no están de acuerdo con nosotros.

El Papa Francisco ahora le ha dado a la FSSPX jurisdicción ordinaria (i.e. facultades para escuchar confesiones). El Papa Francisco limitó estas facultades para menos de un año, remarcando que él “confía [aba]” que la FSSPX trabajaría un acuerdo permanente durante este tiempo. Esta caducidad (de facultades de confesión) mantiene los pies de la FSSPX en fuego, para asegurar que ésta no dé sus nuevos “derechos” por sentado y recuerde que necesitaprobarsea sí misma al Vaticano.

Sin embargo, esta jurisdicción ordinaria es la declaración de la iglesia conciliar que la FSSPX ya no es el enemigo. Como si “Planned Parenthood” (Paternidad Planificada) fuera a declarar que un grupo “pro-vida” en particular ya no se considera un enemigo; igualmente, la iglesia conciliar nos está diciendo que, paso por paso, la FSSPX ha cambiado sus colores y ya no es la enemiga de Roma modernista.

Nosotros, los que firmamos esta carta, declaramos que nos hemos separado de la FSSPX y que, con la ayuda de la gracia de Dios, dedicamos nuestras vidas a la batalla abierta contra los modernistas conciliares, hasta su conversión.

El signo más seguro de que la FSSPX había estado en el camino correcto en el pasado es que Roma modernista la atacaba y calumniaba frecuentemente. El signo más seguro de que los líderes de la FSSPX eran buenos y fuertes en el pasado es que Roma modernista (falsamente) los “excomulgó”. ¡Es una insignia de honor el ser odiados por los enemigos modernistas de Cristo Rey!
Algunas personas objetarán que la FSSPX no hizo algo para recibir este reconocimiento (jurisdicción-confesión) por parte de Roma y, por lo tanto, no debemos “culpar” a la FSSPX por ello. Pero los enemigos en guerra no se hacen favores. Este reconocimiento es un hito apto que muestra cuán lejos ha caído la FSSPX en los últimos años.

Esto es como (en el ejemplo anterior) el grupo “pro-vida” ha ido ablandando progresivamente su posición respecto al aborto pero sin hacer un acto en particular en el momento específico que ‘Planned Parenthood’ “reconoció” que ya no era el enemigo. Por eso, de igual manera, nuestra respuesta a esta objeción es que la FSSPX hizo una gran liberalización para alcanzar este reconocimiento de los enemigos de Cristo, aun cuando no hubo un solo acto de la FSSPX en el momento en que el Papa Francisco hizo el “favor”.
Debajo, está una lista corta del liberalismo en la FSSPX. Esta lista no incluye “rumores”, sino sólo las palabras y obras de los líderes de la FSSPX, publicadas en sus medios u otros en los que fue entrevistada.

La “Neo-FSSPX” se ha liberalizado en un sinnúmero de maneras. Ha dicho cosas falsas y favorables promoviendo: libertad religiosa, los documentos del Concilio Vaticano II, el Nuevo Código de Derecho Canónico, la profesión conciliar de fe, colegialidad, ecumenismo, “eclesiología” conciliar, la nueva misa, la misa “mixta” (rito bastardo), la misa de indulto, la santidad de los papas conciliares, falsas canonizaciones conciliares (e.g. “santa” Faustina, la falsa vidente), devociones conciliares falsas (e.g. la devoción conciliar de la “Divina Misericordia” de “santa” Faustina), mujeres utilizando pantalones, un estándar permisivo y liberal para “planificación familiar natural”, la enseñanza conciliar de que los Judíos no cometieron Deicidio, la enseñanza del Papa Juan Pablo II de que los Judíos son nuestros Hermanos Mayores, elhorrible crucifijo encorvado del Papa Juan Pablo II, lahermenéutica de la continuidad del Papa Benedicto XVI, la falta de estimulación a tener grandes familias, negación de la verdadera distinción (que Monseñor Lefebvre hizo) entre la Iglesia Católica y la iglesia conciliar, etc

Nos detenemos aquí, pero la lista del liberalismo y escándalos la “Neo-FSSPX” es mucho más larga. Esta lista deja de lado las falsedades probadas de la FSSPX que incluso se oponen a la honestidad natural y común. Esta lista deja de lado los (objetivos) pecados graves de los líderes de la FSSPX contra la justicia natural, en la manera en que la FSSPX ha tratado a sus sacerdotes quienes se esforzaron por permanecer fieles a Monseñor Lefebvre y a la Tradición Católica, así como los (objetivos) pecados mortales de negación de sacramentos a los laicos porque intentaron permanecer fieles.

Si algún lector está muy desinformado que ni siquiera puede pensar de ejemplos de la “Neo-FSSPX” haciendo y diciendo cada una de estas cosas, se puede informar utilizando las palabras y obras de los líderes de la FSSPX (con enlaces a los medios de la FSSPX y acompañados de un análisis cuidadoso), que se dan aquí:catholiccandle.neocities.org(Inglés),dominicansavrille.us(Inglés),cormariae.proboards.com(Inglés),therecusant.com(Inglés),ecclesiamilitans.com(Inglés),truetrad.com(Inglés),cristiadatradicinalista.blogspot.co.uk(Español),nonpossumusvcr.blogspot.com(Español),dominicainsavrille.fr(Francés),rexcz.blogspot.cz(Checo),stmarcelinitiative.com/eleison-comments(5 idiomas).

Esta corta lista (arriba) del liberalismo de la FSSPX ni siquiera aborda sus (objetivos) pecados graves de omisión. Sostenemos que hay muchas influencias liberales en el mundo que nos afectan, que la mayoría de Católicos Tradicionalistas se vuelven conciliares si sus sacerdotes simplemente se mantienen callados respecto a los principales errores de nuestro tiempo; como los sacerdotes de la FSSPX hacen ahora. Es evidente que el R.P. Daniel Cooper habló por muchos sacerdotes de la FSSPX cuando declaró: “Muy raramente hay una buena razón para … estar atacando el Concilio Vaticano II desde el púlpito.”1

¡Por amor a Cristo Rey y de la Fe Católica, rechazamos a los sacerdotes de la “Neo-FSSPX”!

La Fe Católica es lo más importante que tenemos. Por eso, como hemos notado que la FSSPX se vuelve más liberal, esto angustió enormemente nuestros Católicos corazones. Aun cuando el liberalismo de la FSSPX fuera menos frecuente y de un tipo débil, no deseábamos tomar siquiera un solo pequeño riesgo con nuestro más precioso regalo,viz., la Fe Católica. La angustia de nuestros Católicos corazones ha aumentado a medida que el liberalismo de la FSSPX se volvió más frecuente más virulento que nunca.

Por esta razón, nos negamos a asistir a cualquier actividad de la FSSPX. Tratamos a la FSSPX como el grupo de indulto/liberal que se ha vuelto. Sólo vamos a Misa y recibimos los Sacramentos de sacerdotes que se levantan en contra de ese liberalismo que la FSSPX ha abrazado progresivamente. Escogemos la obediencia a la Fe Católica, antes que a cualquier colaboración en la destrucción de la Fe.

Algunas personas pensarán que estamos tomando riesgos, porque hemos terminado todo contacto con la FSSPX que, en el pasado, nos proveyó de la Misa, los Sacramentos y la exposición diaria de la Fe. Respondemos que nos damos cuenta de los “riesgos” (por así decirlo) que tomamos. Nos “arriesgamos” a ser cortados del liberalismo en aumento que ataca nuestra Fe. Nos “arriesgamos” a ya no ser confundidos con los partidarios del liberalismo (porque ya no apoyamos a la FSSPX). Nos “arriesgamos” demostrando con nuestras acciones que la Fe es suprema y que no nos uniremos a aquellos que buscan unidad con, y la aprobación de, los enemigos de Nuestro Señor Jesucristo. Nos “arriesgamos” enseñando al mundo que tenemos suma lealtad al Papa Francisco y sumo respeto a Monseñor Fellay al demostrarles la caridad de estar firme y públicamente contra sus errores mortales.

La Fe Católica sin compromisos es más importante que tener acceso a los Sacramentos. En los Domingos que no tenemos Misa, guardamos el día santo con nuestras familias. Algunos de nosotros hicimos esto en los 70’s cuando, por el bien de la Fe, no teníamos Misa. Con los corazones llenos de confianza en la Providencia, hacemos gustosos este sacrificio por amor a Él Quien es nuestro Rey así como el Sacerdote y Víctima, Quien hizo Su Infinito Sacrificio, hasta la muerte en la Cruz.

Algunos de nosotros estamos lo suficientemente viejos para haber peleado por la Fe durante la devastación de los 60’s-70’s. Para aquellos de nuestros lectores que ahora tienen la estrategia de “pelear dentro” contra el liberalismo progresivo de la FSSPX, les advertimos que esta estrategia fue, entonces, el error más común entre nuestros amigos y conocidos Católicos. Casi todos aquellos—bien intencionados—Católicos se cegaron progresivamente por los pequeños e imperceptibles pasos y se volvieron miembros de la nueva religión conciliar. Sólo una pequeña minoría luego vio que su estrategia fue errónea y dejó la iglesia conciliar con su Fe Católica y Tradicional intacta.

Así que, a nuestros que no están de acuerdo con que llegó el momento de dejar de asistir a las Misas de la FSSPX, aun cuando la FSSPX se está volviendo más liberal, les preguntamos:¿Cuál es su punto de referencia? Si ustedes no lo tienen, ¿cómo evitarán perder la Fe a través del gradualismo, como le sucedió a muchas personas quedándose en sus capillas en los 60’s?

Entendemos que algunas personas nos malinterpretarán y a nuestra decisión. Hágase la Voluntad de Dios. Entendemos que algunas personas nos calumniarán de “sedevacantistas” (i.e., aquellos que sostienen que no tenemos P apa—una posición que rechazamos). Tales falsedades no nos harán encogernos en nuestra determinación de proteger nuestra Fe, incluso si por ello debemos sufrir algo por amor de Nuestro Señor Jesucristo.

Llamando solemnemente a Dios como nuestro testigo y con el Juicio Final en nuestra mente, firmamos esta carta como Soldados de Cristo, que han sido signados con la señal de la Cruz y confirmados con el Crisma de la Salvación:

Fr. François Chazal (Philippines) Fr. Juan Ortiz (USA) Fr. Rafael Arizaga, OSB Benedictine Monks of the Monasterio de San José (Santa Sofía, Boyacá, Colombia) Fr. Arturo Vargas Meza Pbro (Gaudalajara, Mexico) Fr. Richard Voigt (USA) Glenn J. Pfeiffer (USA) Suzanne M. Pfeiffer (USA) John Pfeiffer (USA) Anne Pfeiffer (USA) Bernadette Pfeiffer (USA) Paul Pfeiffer (USA) Joanna Pfeiffer (USA) Hugh Akins (USA; founding president League of Christ the King) Kathleen Ann Donelly (Australia) Gregory Taylor (England) Waltraud Taylor (England) Brendan Youngman (Melbourne, Australia) Marianne Youngman (Melbourne, Australia) Jessica Youngman (Melbourne, Australia) Shirley J. Crocco (USA) Peter Yourell (USA) Chris Matthew Nazareno (USA) Noel Christie Danker (Singapore) Mary-Anne Danker(Singapore) Raphael Mario-Francesco Danker (Singapore) Tony La Rosa (Canada) Melinda Seaman (USA) Toni Bryce (USA) Rosemary Schmidt (USA) Thelma Matelis (USA) Steven Garrison (Massachusetts USA) Laura Garrison (Massachusetts USA) Veronica Arízaga (Mexico) Víctor Arízaga y fam (México) Brian Torsell (USA) Michael Anthony Samuel Stafford (USA/Mexico) John Sharkey (New Zealand) Susan Sharkey (New Zealand) Stephen Kaldawi (Texas USA) Frank J. Marchiori (Texas USA) Emmanuel Edo Rantau (Indonesia) Mirella Simonato (Australia) Georgina Varhelyi (Australia) Samuel Loeman (Wanganui, New Zealand) Linda Loeman (Wanganui, NZ) Hannah Loeman (Wanganui, NZ) Elisa Loeman (Wanganui, NZ) Rachel Loeman (Wanganui, NZ) Rebecca Loeman (Wanganui, NZ) Josiah Loeman (Wanganui, NZ) Jesse Loeman (Wanganui, NZ) Benjamin Loeman (Wanganui, NZ) Elias Loeman (Wanganui, NZ) SFC Steven M Barry, USA RET. (USA) Mrs Rona Joyner (Queensland, Australia) Stephen Joyner (Queensland, Australia) Jennifer Joyner (Queensland, Australia) Andrew Pfeiffer (USA) Ron Nord (Canada) Vivian Nord (Canada)
Mrs. Beverly Redden (USA) Helen McKenna (Western Australia) Mitchell McKenna (Western Australia) Monica McKenna (Western Australia) Nick Yost (USA) Louise Yost (USA) John Hodgson (Australia) Gail Hodgson (Australia) Peter Bezzina (Sydney, Australia) Anthony Bezzina (Sydney, Australia) Betty Gallen (Australia) John Scrivener (Australia) Muriel Scrivener (Australia) Mitchell Brett (Canada) Jacqueline Brett (Canada) Emily Brett (Canada) Matthew Brett (Canada) Michael Brett (Canada) Justin Brett (Canada)

[Cualquier Católico Tradicional que ha sido Confirmado y que desea firmar esta carta abierta, puede añadirse mandando su nombre completo y país a catholiccandle@gmail.com].

  1.   Citado de la carta del R.P. Copper a fieles de la FSSPX en Arcadia California; Julio 2015, pág.2 (énfasis añadido).  

domingo, 9 de febrero de 2020

¿Qué enseñanzas del Concilio Vaticano II “eliminaron” la necesidad de la Iglesia Católica?



   La falsa enseñanza de la salvación universal (todo  mundo se va al Cielo). La gente tiende a creer lo que quiere creer, y especialmente cuando es fácil y conveniente.

   Es fácil entender quiénes están detrás del error de la salvación universal: el demonio, los masones, los líderes de las falsas religiones y los líderes modernistas liberales, quienes son parte del elemento humano de la Iglesia Católica. Estos líderes participaron en el Concilio Vaticano II.

   Los inevitables resultados son los siguientes, (las estadísticas del año 1965 al 2016 nos indican lo devastador que esta falsa enseñanza ha sido en la Iglesia Católica):

 1.- Eliminado el fervor religioso y la necesidad de la Iglesia Católica;
  2.- Tremenda disminución de la asistencia a Misa en un 33%;
  3.- Tremenda disminución del apoyo económico a la Iglesia;
  4.- Tremenda disminución de las confesiones;
  5.- Tremenda disminución de la oración en familia;
 6.- Tremenda disminución de las vocaciones religiosas, bajó un 63%;

  7.- Tremenda disminución de las escuelas católicas, bajó un 50 %;
  8.- Tremenda disminución de los matrimonios, bajó un 42%;
  9.- Tremenda disminución de los bautismos, bajó un 51%;
 10.- Tremendo aumento del número de cremaciones;
 11.- Casi eliminada la Extremaunción;
 12.- Eliminada la necesidad de Misas Requiem  y oraciones para los difuntos;

 13.- Cambio de la “misa” a un entretenimiento, en lugar de una oración por las pobres   almas;
  14.- Eliminación de los días festivos;
  15.- Eliminación de la abstinencia de carne los viernes;

  16.- Tremenda disminución del número de Hermanas Religiosas –¡bajó 262%! (la mayoría de las Religiosas que quedan son ancianas);

  17.- Aumento de divorcios y problemas familiares;
  18.- Aumento del número de madres solteras;
 19.- Tremenda reducción del número de Hermanos Religiosos ¡bajó 300 %!;
  20.- Tremendo aumento del número de  parroquias sin sacerdote, ¡aumentó 600%!;

 21.- Esta falsa enseñanza de la salvación universal, sugiere o fomenta la idea de que no hay castigo por el pecado;
     Habrá otras estadísticas peores en puerta, pues el fervor religioso y la moral se han olvidado fácilmente por la idea de la “salvación universal”.

   En el pasado, la salvación era incierta, muchos desarrollaban el fervor religioso pues querían evitar el infierno e ir al cielo. Si el cielo ya está “asegurado” por el Concilio Vaticano II, el fervor religioso ya no está en la mente de las personas, por lo que resulta innecesario.

   Los sermones sobre el Infierno son cosa del pasado. Ahora, en los funerales, los fallecidos nos miran felices y sonriendo. Eso es lo que los vivos quieren creer de sus seres queridos ya  fallecidos. También les es confortable pensar que cuando sea su turno así será.

   Antes del Concilio Vaticano II los Católicos sabían que una de las principales razones por las que Nuestro Señor Jesucristo vino a la tierra y sufrió por nosotros, fue para mostrarnos cómo salvar nuestras almas y ganar el cielo. Así que los Católicos apoyaban a la Iglesia y trabajaban para alcanzar el objetivo: el Cielo. Pero es mucho más fácil creer que el objetivo ya está “asegurado” sin ningún esfuerzo verdadero de nuestra parte, por eso la gente sigue a sus líderes liberales, incluyendo los sacerdotes de sus parroquias conciliares.

   No es suficiente pertenecer a la Iglesia para salvarse. Sólo aquellos Católicos que vivan de acuerdo a las enseñanzas (tradicionales)  de la Iglesia Católica. Por lo tanto, no hay camino fácil. Nuestro Señor nos mostró el camino por 33 años sobre la tierra. Debemos seguir Su ejemplo y cargar nuestras cruces, no importa qué tan pesadas sean, con tal que alcancemos nuestra salvación.

 Catholic Candle February 2020
  

    
  


miércoles, 5 de febrero de 2020

Si nos persiguen es que somos enemigos de los enemigos de Cristo: Ignacianas


LA PRESENTACIÓN EN EL TEMPLO

  Caminan en silencio, con modestia celestial, recogidos interiormente, porque nunca abandonan la presencia de Dios, a quien tienen allí, en los brazos de María, hecho Hombre. 
  Meditan sobre el objeto del viaje, que es para consagrar a Dios al Niño.
  Ni Ella ni Él estaban obligados a la ley: Él, por ser Dios, y Ella porque era Madre Virgen.

No están obligados, pero quisieron cumplir la ley para darnos ejemplo de respeto a la ley; María, para humillarse pasando como una mujer vulgar, y Jesús para pasar como un niño nacido igual que los demás.

  A la entrada del templo hallan al anciano Simeón. Toma a Jesús en sus brazos y, ante la admiración de María y José. Entona aquel precioso himno de acción de gracias.

  Una muchedumbre de judíos entra y sale del templo.
  Miran al Niño pero no ven en Él al preparado ante la faz de todos los pueblos como la luz que se había de revelar a las gentes y gloria del pueblo de Israel.

  Quizá nosotros vemos a Jesús en el Sagrario y vemos a María y José en sus altares; pero no conocemos a Cristo como luz y gloria del mundo.

  Entramos en la Iglesia rutinariamente. Y así nos pasamos la vida sin conocer a Cristo.

  Es que para conocer al Salvador es necesario, como Simeón, ser justos y temerosos de Dios o como Ana, la profetisa, ocuparse en la oración y el ayuno, es decir, el sacrificio.

  ¿Qué diría la Virgen a quien se anunciaban sus futuros dolores?
  Lo que al ángel: “Hágase en mí según tu palabra”.
  Verdaderamente que Jesús vino:

  ¡Para ruina de muchos! De todos los que no quisieron reconocerle y salvarse.
  ¡Para resurrección de muchos! De todos los que quisieron conocerle y servirle.

  No vino para la muerte y perdición de nadie, sin su voluntad.
  Vino para salvarlos a todos, siendo Él signo de contradicción.
  Desde que nació fue perseguido hasta que se le puso en la Cruz.

  Y desde entonces sus servidores lo son también: cuanto más seguidores, más perseguidos.

  Es señal de los amadores de Jesucristo.

  Por eso, si nos dejan en paz sus enemigos, mal; si nos persiguen, bien.
  Si nos persiguen es que somos enemigos de los enemigos de Cristo.
  Si no nos persiguen, es que somos indiferentes a los enemigos de Cristo.
  La primera fragancia que se percibe al entrar en el templo es la del incienso de los sacrificios.

  El incienso grato a Dios es el corazón sacrificado y humilde.

  Y allí están el Corazón divino de Jesús y el Corazón Inmaculado de María. Dos altares sagrados desde donde sube al Cielo el incienso de todas las virtudes: la humildad y la pobreza, la obediencia y el sacrificio.

  Gustemos la paz serena e inalterable de esta Sagrada Familia en todos los sucesos de la vida.

  ¡Jesús divino, haz que te conozcamos para más amarte y seguirte.
  Angel Anaya, S.J.

lunes, 3 de febrero de 2020

SAN BLAS



Al principio ejercía la medicina, y aprovechaba de la gran influencia que le daba su calidad de excelente médico, para hablarles a sus pacientes en favor de Jesucristo y de su santa religión, y conseguir así muchos adeptos para el cristianismo.

Al conocer su gran santidad, el pueblo lo eligió obispo.

Cuando estalló la persecución de Diocleciano, se fue San Blas a esconderse en una cueva de la montaña, y desde allí dirigía y animaba a los cristianos perseguidos y por la noche bajaba a escondidas a la ciudad a ayudarles y a socorrer y consolar a los que estaban en las cárceles, y a llevarles la Sagrada Eucaristía.

Cuenta la tradición que a la cueva donde estaba escondido el santo, llegaban las fieras heridas o enfermas y él las curaba. Y que estos animales venían en gran cantidad a visitarlo cariñosamente. Pero un día él vio que por la cuesta arriba llegaban los cazadores del gobierno y entonces espantó a las fieras y las alejó y así las libró de ser víctimas de la cacería.

Entonces los cazadores, en venganza, se lo llevaron preso. Su llegada a la ciudad fue una verdadera apoteosis, o paseo triunfal, pues todas las gentes, aun las que no pertenecían a nuestra religión, salieron a aclamarlo como un verdadero santo y un gran benefactor y amigo de todos.

El gobernador le ofreció muchos regalos y ventajas temporales si dejaba la religión de Jesucristo y si se pasaba a la religión pagana, pero San Blas proclamó que él sería amigo de Jesús y de su santa religión hasta el último momento de su vida.

Entonces fue apaleado brutalmente y le desgarraron con garfios su espalda. Pero durante todo este feroz martirio, el santo no profirió ni una sola queja. El rezaba por sus verdugos y para que todos los cristianos perseveraran en la fe.

El gobernador, al ver que el santo no dejaba de proclamar su fe en Dios, decretó que le cortaran la cabeza. Y cuando lo llevaban hacia el sitio de su martirio iba bendiciendo por el camino a la inmensa multitud que lo miraba llena de admiración y su bendición obtenía la curación de muchos.

Pero hubo una curación que entusiasmó mucho a todos. Una pobre mujer tenía a su hijito agonizando porque se le había atravesado una espina de pescado en la garganta. Corrió hacia un sitio por donde debía pasar el santo. Se arrodilló y le presentó al enfermito que se ahogaba. San Blas le colocó sus manos sobre la cabeza al niño y rezó por él. Inmediatamente la espina desapareció y el niñito recobró su salud. El pueblo lo aclamó entusiasmado.

Le cortaron la cabeza (era el año 316). Y después de su muerte empezó a obtener muchos milagros de Dios en favor de los que le rezaban. Se hizo tan popular que en sólo Italia llegó a tener 35 templos dedicados a él. Su país, Armenia, se hizo cristiano pocos años después de su martirio.

En la Edad Antigua era invocado como Patrono de los cazadores, y las gentes le tenían gran fe como eficaz protector contra las enfermedades de la garganta. El 3 de febrero bendecían dos velas en honor de San Blas y las colocaban en la garganta de las personas diciendo: "Por intercesión de San Blas, te libre Dios de los males de garganta". Cuando los niños se enfermaban de la garganta, las mamás repetían: "San Blas bendito, que se ahoga el angelito".

A San Blas, tan amable y generoso, pidámosle que nos consiga de Dios la curación de las enfermedades corporales de la garganta, pero sobre todo que nos cure de aquella enfermedad espiritual de la garganta que consiste en hablar de todo lo que no se debe de hablar y en sentir miedo de hablar de nuestra santa religión y de nuestro amable Redentor, Jesucristo.