Tres veces pidió Jesús el amor de Pedro, porque tres veces se lo había
negado. Y tres veces se lo exige, porque es mucho el amor que se requiere para
el oficio de pastor.
Si Cristo me preguntara: ¿Me amas? ¿Qué contestaría yo? Señor: Tú sabes
que no te amo. Quebranto tu Ley y no lo siento; veo perderse las almas, y nada
hago por ellas; se persigue a tu Santa Iglesia, y no la defiendo; veo cómo
perecen de necesidad los pobres, y no los socorro. Miento si digo que te amo;
pero quiero amarte.
Ignacianas
Angel
Anaya S.J.