A continuación presentamos el testimonio de un fiel respecto al acuerdismo en la FSSPX
LO QUE MENOS IMPORTA PARA LA FRATERNIDAD SAN
PIO X: LOS FIELES
En
una situación, como la que llevamos soportando los fieles durante estos dos
años, veo dos acciones: una activa
y otra pasiva.
En
cuanto a la activa: en este caso son los superiores de la Fraternidad; el
superior general, los asistentes, los sacerdotes, los priores y hasta las
propias religiosas (si!, no exagero, hasta las propias religiosas!) son los que
han hecho, deshecho, corregido, sacado, vuelto a poner, etcétera, y etc., como
se dice vulgarmente "han hecho lo
que han querido". Sin respetar al fundador de la congregación.
No
era eso lo que ellos mismos nos habían enseñado por años y años; no fue eso lo
que hemos aprendido con Monseñor Lefebvre. ¿Cuándo Monseñor Lefebvre habló de
la manera en la cual ahora debemos escuchar y releer las palabras de Mons.
Fellay?, Pero siendo simples personas, casi sin estudios, hombres de campo,
mujeres dedicadas al cuidado de la familia, simples amas de casa, al leer a
nuestro querido Monseñor Lefevbre, no necesitábamos preguntar a los sacerdotes
qué quería decir tal o cual cosa. Él nos hablaba y nos escribía de la manera
más sencilla y directa. ¿O quién no recuerda el primer libro que se nos ponía
en la mano, cuando comenzamos a frecuentar las "misas de antes" era: "Carta Abierta a los Católicos Perplejos?
¿Tuvimos alguna duda por
aquél entonces? No. Vimos con tanta claridad lo que estaba pasando y la gracia
actuó en nosotros, tuvimos la gracia de
Dios de comprender, a través de las palabras tan sencillas de Monseñor Lefebvre,
que no éramos unos renegados y ni excomulgados. Que éramos y seguimos siendo
católicos y que no necesitábamos ir a Roma, ¿a qué? Así nos lo explicaban los
sacerdotes por aquellos años, ya que nunca nos sentimos fuera de la Iglesia
Católica, aunque por la calle nos decían "integristas." Y ahora resulta es
necesario tratar con la Roma modernista para eso se nos mando rezar a nuestra
Señora de Fátima los miles y miles de rosarios quizá fueron millones cuando más
bien debíamos rezar por la conversión de Rusia, pero no a esta Roma actual. Por
favor, ¿qué es lo que quiere realmente Mons. Fellay? ¿Por qué hay que ir a
Roma?...
En
cuanto a la pasiva: que somos nosotros los
pobres fieles. Antes la vida de comunidad en la capilla, era las charlas de los
padres, las clases de catecismo para los niños,
aquellas clases de confirmación en donde más de uno tenía ya varios años
encima, pero felices por comprender lo que se nos enseñaba. Sí, sí, suena un
poco ridículo, pero es que era así!! Las reuniones con las familias, con los
jóvenes, había mucha vida de comunidad, mucha unión. La capilla y el priorato,
eran el centro de nuestra vida. Vivíamos para ello. La preocupación constante
de las necesidades de los sacerdotes, del mantenimiento de las capillas, había
un verdadero, y sacrificado Apostolado, sí, muy sacrificado, porque
antes....éramos pobres!!! Y qué hacían estos "agentes pasivos"?:
simplemente colaboraban con dinero, con trabajo. El fiel se volcó hacia la
Hermandad San Pío X, porque allí se encontraba muy seguro. Quisiera preguntarle
a Mons. Fellay ¿Cuánta gente ha donado sus propiedades, sus sueldos, su
colaboración para la "casa en donde se encontraban seguros”?
Qué
ha hecho el fiel: poner las "peras", como se dice, poner su dinero. Y
combatíamos el error con la ayuda de los sacerdotes, de los priores, de los
obispos! Nos equivocábamos, claro que sí, pero ahí siempre estaba la figura y
la presencia del pastor. Claro que éramos ovejas y muy descarriadas; pero allí
estaba el pastor. Por eso no dejábamos la Hermandad, porque allí estábamos
seguros y con la verdad. Éramos (y somos), católicos, apostólicos y romanos y
no teníamos ninguna necesidad de ir a Roma; al contrario, se la combatía! El
fiel seguía poniendo su dinero en las limosnas pero no podía decir que Mons.
Fellay era un liberal. Veíamos lo que pasaba y la bola de nieve que se venía
cada vez más cargada de novedades.
¿Fuimos tontos por tantos años junto a la
Hermandad, por señalarnos a los liberales con sus enseñanzas? ¡Hemos aprendido la lección! ¿Qué han traído
todos estos años de tanto desgaste en nuestra fidelidad a la congregacion?
Hemos perdido verdaderos amigos en la fe; amistades con las familias
tradicionales, con nuestros primos, con nuestros hermanos. Aquel adagio
"todo tiempo pasado fue mejor".
¡Qué cierto que es! Nunca nos sentimos tan manipulados
como ahora. ¿Se creen que somos tontos? Tomen algunas de las revistas de 25, 30
ó 40 años atrás, ¿Es lo mismo que se dicen ahora? Mi cabeza se volvió blanca al
leer en el diario Clarín de Argentina que, padre Bochacourd dijo que los judíos
no mataron a Nuestro Señor! Y lo que es peor el no desmintió nada. ¿Qué les ha
pasado? ¿Por qué los que son tan inteligentes nos traen cosas nuevas y malas y
hay que aceptarlas?
¿Porqué
siguen diciendo que, "...seguimos
las enseñanzas de Monseñor Lefebvre...?" Mentirosos! Mentirosos!