La santidad en la tierra es gracia. ¿Y quién la ha tenido mayor que
María? ¿De quién se ha dicho que la ha poseído en su plenitud? Un alma en gracia es el espectáculo
más bello que podemos imaginar en la tierra. Es la imagen de la hermosura del
mismo Dios. ¡Qué santidad la de Santa Mónica que supo formar a un San Agustín!,
la de Santa Isabel que convirtió todo su reino a Dios, la de Santa Teresa de
Jesús a quien le dijo el Señor, que sólo por ella hubiera creado el mundo con
todas sus maravillas, y así miles y miles de santos y santas que perfuman a
diario el jardín de la Iglesia. Junta toda esa santidad y toda esa belleza y
hermosura de esas almas y compárala con la de María. Ella en su Concepción tuvo más santidad y
gracia que todos juntos. ¿Qué será María?
El alma de María nunca se manchó lo más mínimo. Sólo María es la flor de
pétalos blancos, sin polvo y sin espinas, rosa de huerto cerrado, pura más que
el mismo sol, que también tiene manchas, por eso de Ella, dice la Iglesia, que
“comparada con la luz, es más pura y brillante”. ¡Qué
hermosísima el alma de María!
Por eso se encuentra en su grado perfecto en el Cielo. María Inmaculada
participa de Dios, tiene más fuego de amor que todos los ángeles juntos, porque al fin ellos son
siervos y esclavos de Dios. María es la Madre del Señor y la Reina del Cielo y
de los ángeles todos. ¿Qué será María?
Mírala cual la pintó Murillo después de mucho orar y comulgar. ¡Qué
retrato tan bellísimo! Pero el pintor de la realidad no fue Murillo, ni pudo
ser otro que el mismo Dios. Dios con todo su poder pintó y hermoseó el alma de
María. ¿Qué será la Inmaculada?
Toda hermosa eres Madre mía…
Y todo un Dios se recrea en tan graciosa belleza.
Que de esta belleza de pureza y virginidad me enamore para así imitarte
en algo, y para ello te doy desde ahora alma, vida y corazón.
¡Mírame con compasión, no me dejes Madre mía! Y si no me dejas en tus brazos de Madre
participaré de tu belleza y contigo iré a gozar de ella en el Cielo.
Meditaciones sobre
la Santísima Virgen María
Rodríguez Villar