"Los reformistas pensaron que cambiando las cosas de la Iglesia, tal vez la Iglesia estaría mas viva. Pero NO. No se pueden cambiar las cosas de la Iglesia. Las cosas de la Iglesia fueron instituidas por Jesucristo. El Sacrificio de la Misa, los Sacramentos, el Credo, nuestro Catecismo, la Sagrada Escritura; todo esto viene de Jesucristo. Cambiar esto es cambiar lo que instituyo Jesucristo."