MONEDA CON QUE SE COMPRA EL PARAISO
El
Señor se apareció un día a Santa Gertrudis, contando monedas de
oro. Ella se atrevió a preguntarle qué estaba contando. "Cuento
-le respondió Jesucristo- tus Avemarías: ¡son la moneda con que se
compra el paraíso!"