martes, 6 de mayo de 2014

LOS ACONTECIMIENTOS MUNDIALES A LA LUZ DE LOS SECRETOS DE LA SALETTE Y DE FATIMA (1a-6a parte)




CAPITULO I:  LAS ADVERTENCIAS DEL CIELO

Nunca la humanidad había llegado a una crisis tan severa como la que se nos presenta en estos tiempos; tres corrientes forman un laberinto mortal que quien osa entrar en él sin el recurso divino se perderá o se volverá loco.

Estos son sin duda el elemento religioso, político y económico los referentes por excelencia que han armado una verdadera confusión en donde la sociedad humana es jaloneada para uno de estos tres polos.

Como explicar sin temor a errar la actual situación que engloba a un conglomerado de gente que, sin saber o teniendo conocimiento de lo que está pasando, se encuentran enredados en una telaraña diabólica tendida por estos tres polos.

Humanamente hablando no existe ninguna explicación a este fenómeno disgregante. En este terreno de lo natural el alma se mete en laberintos oscuros y que apestan a azufre, pero si se le considera desde el punto de vista SOBRENATURAL las cosas se ven más claras y se puede llegarse a una posible explicación y tener una idea más clara sobre a donde nos conduce todo esto.

La visión de lo sobrenatural sobre la crisis del mundo encuentra, por otro lado, escépticos aun dentro de la Iglesia de siempre, será porque no les interesa?, Porque según ellos no quieren meterse en política internacional o porque quieren mantener en la ignorancia a sus rebaños y en general a una parte del mundo? o porque simplemente ¿no quieren aceptar y creer en las profecías del APOCALIPSIS de San Juan escrito para estos tiempos y en las apariciones de la Santísima Virgen en la Salette o Fátima que han sido autorizadas por la Iglesia en su momento?

Consideramos que es por este camino por donde se pueden llegar a conclusiones más claras y convincentes para comprender el gran peligro al que está expuesta la humanidad entera y preparar nuestras almas para que, de esta manera, no nos sorprendan los acontecimientos mundiales que están por desatarse.

Esta consideración nace también de la conducta que Nuestro Señor manifestó a través de los profetas en el Antiguo Testamento cuando su pueblo elegido se alejaba de Él y no nos extrañe que llame a Ciro su “ungido,” Zalmanazar y a Darío entre otros tantos. Y en el Nuevo Testamento sea el mismo Rey de los profetas el que profetice el sitio de la infiel Jerusalén por los romanos, cuando sentado mirando la ciudad en una noche bañada por la luz de la luna diga de manera solemne y compasiva:
”Jerusalén, Jerusalén, cuantas veces quise reunirte como la gallina reúne a sus polluelos…” Y San Juan haya sido el apóstol del Apocalipsis en donde se encierran misterios que son para el fin de los tiempos. No es de extrañar que, a falta de profetas, Nuestro Señor por medio de su Santísima Madre concretice lo que en el Apocalipsis se dice acerca de estos postreros tiempos. Las razones para infligir un castigo ejemplar a la humanidad actual son muchas, pero me referiré a las señaladas por Nuestra Señora de la Salette y de Fátima.

Nuestra Señora de la Salette comienza con estas palabras que hielan la sangre: DIOS VA A CASTIGAR DE UNA MANERA SIN PRECEDENTES. Ay de los habitantes de la Tierra! Dios va a derramar su cólera y nadie podrá sustraerse a tantos males juntos”. ¿Por qué estas duras palabras cuando ella misma es la Madre del amor hermoso, del temor y de la santa esperanza? Estas son las razones:

ROMA PERDERÁ LA FE. ¿Quién en su momento creería que Roma perdería la fe? NADIE. Sin embargo hoy no existe ninguna duda Roma perdió la fe como lo afirmó Mons. Lefebvre antes de morir, que triste y lamentable profecía que encaja perfectamente con aquellas palabras de Nuestro Señor Jesucristo: “Acaso cuando viniere a la tierra encontraré fe” (hablando de su segunda venida) y como consecuencia lógica viene lo otro:

Los Sacerdotes, Ministros de mi Hijo, los Sacerdotes, por su mala vida, por sus irreverencias e impiedad al celebrar los santos misterios por su amor al dinero, a los honores y a los placeres, se han convertido en cloacas de impureza, sí, los Sacerdotes piden venganza y la venganza pende de sus cabezas. Ay de los sacerdotes y personas consagradas a Dios que por sus infidelidades y mala vida crucifican de nuevo a Mi Hijo! Los pecados de las personas consagradas a Dios claman al Cielo y piden venganza, y he aquí que la venganza está a las puertas, pues ya no se encuentra nadie que implore misericordia y perdón para el Pueblo; ya no hay almas generosas ni persona digna de ofrecer la víctima sin mancha al Eterno a favor del mundo.  

Bien conocido nos es el comprobar que en la actualidad el Santo Sacrificio de la Misa, casi en su totalidad ya en 1986 Mons. Lefebvre, en el sermón de las ordenaciones de ese año, dijo: “Cada vez hay más misas inválidas en el mundo” las razones de esta invalidez de la misa moderna las dió ese día.  La relajación de los sacerdotes nos es conocida no hay necesidad de buscar pruebas sobre el tema. A esta relajación le sucede otra también muy grave.

En el año de 1865 se verá la abominación en lugares santos, en los conventos, las flores de la Iglesia estarán corrompidas y el demonio será como el rey de los corazones. Que los que estén al frente de las comunidades religiosas vigilen a las personas que han de recibir, porque el demonio usará toda su malicia para introducir en las órdenes religiosas a personas entregadas al pecado, pues los desórdenes y el amor de los placeres carnales se extenderán por toda la Tierra.



CAPITULO II: Rusia

Con la dinastía Romanov, en especial con Pedro el Grande quien recorrió Europa, con las nuevas ideas que adquirió en su recorrido quiso imponerlas a rajatabla en Rusia, es aquí donde el estado y la Iglesia ortodoxa se separan, pero también se debe admitir que algunas mejoras ayudaron al progreso de la nación. 

Pedro el grande muere en año 1725 dejando abierto el camino a Europa y costumbres europeas que solo la élite o las personas de alta sociedad las  siguieron, el pueblo ruso continuó sus tradiciones ortodoxas y estas se arraigaron aun más.

Pero la religión permaneció bajo la mirada de la bienaventurada virgen María que desde  su consolidación como nación quien, a pesar de sus desventuras, siguió profesando UNA TIERNA DEVOCION A LA REINA DE TODO LO CREADO, Alexis Kumiakov nacido pocos años después de Pedro II nos vuelve a recordar los valores de la nacionalidad rusa y el papel importantísimo que tiene la santísima virgen María dentro de este concepto de nacionalidad: 

“En el pasado esta la inmensidad de la llanura rusa iluminada por  las cúpulas doradas de las Iglesias brillando al sol, recorrida por los servidores del Señor, los fieles que oran, numerosos como la hierba de las estepas la arena en los mares; esta Kiev, CUNA DE LA GLORIA RUSA, con el dnieper, BAUTISTERIO PURO DE RUSIA, con las grutas, tumbas de los santos, cuya SOMBRA SILENCIOSA ES MAS BELLA QUE LOS PALACIOS DE LOS REYES. Está Moscú con sus catedrales, con los maitines de pascua en el Kremlin. Hay un pensamiento ruso que inspira al agricultor en su izba y al eremita en su skita. Esta la fuente oculta en el seno de Rusia apacible, límpida, secreta, pero poderosa, inagotable como el misterio de la vida, reflejando en su espejo todo el azul celeste del cielo, y cuyas ondas apagaran la sed espiritual de los pueblos y fecundaran al mundo iluminado por los rayos del amor, de la santidad y de la paz”.

Hay por lo tanto en Rusia: una tierra rusa, una historia rusa, un ideal ruso; y este ideal no está en la grandeza material:

“De toda esta fuerza, de toda esta gloria,
De todo este polvo, no te enorgullezcas…
Todo espíritu de orgullo es estéril,
El oro es engañoso, el acero se quiebra:
Lo que es sólido, es el mundo luminoso de la santidad;
Lo que es fuerte, es la mano de los que oran”.

Y he aquí que, porque eres humilde,
Porque con simplicidad de niño,
Oculta en el silencio del corazón,
Has acogido la voz del Todopoderoso,
El te ha hecho oír su llamado;
Te ha dado la espléndida misión
De guardar para la humanidad la herencia,
De los sublimes sacrificios y de las acciones puras;
De guardar la santa fraternidad de los pueblos,
La copa vivificante del amor,
Y la riqueza de una ardiente fe”.

Quiero ceñirme  a lo esencial y dejo de lado otros aspectos negativos de dicha nación por no formar parte de la trayectoria y objeto de nuestro ensayo,  pero por otro lado, no hay nación en donde no se encuentren aspectos o matices oscuros.   ¿Qué nación no tiene también su lado negativo? Todas tienen su pro y su contra unas más y otras menos, pero aun en ellas también algo de deleznable y cruel.

Ahondemos más sobre el aspecto mariano del pueblo ruso: Del 24 al 26 de mayo de 1858, en ocasión del centenario de las apariciones de Ntra. Señora de Lourdes, se realizó una peregrinación rusa a Lourdes. Los participantes acudieron de todas partes, sobre todo de Francia.

Después de dicha peregrinación, el arcipreste Alejandro Rehbinder, rector de las parroquias ortodoxas rusas de Biarritz y de Pau, y decano de las del sudoeste de Francia, escribe una carta a Mons. Théas, obispo de Tarbes y de Lourdes de la que extractamos el siguiente párrafo: 

“El recuerdo de ese lugar embalsamado por la presencia, invisible para nuestros ojos, pero cuán sensible para nuestras almas de la Santísima Madre de Dios, en esos minutos en los que hemos podido orar allí, no solo personalmente, sino representando la santa y desdichada Iglesia de Rusia, e incluso de toda la Santísima Iglesia ortodoxa católica de Oriente, permanecerá entre los recuerdos más caros de nuestra vida. En la gran cuestión que todos tenemos en el corazón, la de la reunión de las Iglesias, vuestra graciosa autorización ha tenido, monseñor, un cierto alcance indiscutible. Al menos en nuestros corazones, el tabique interior que nos separa de la Iglesia Romana, ha perdido una gran parte de su fuerza de contención. Desde el presente, estamos unidos en nuestra común veneración por la Santísima Madre de Dios, cuya presencia muy especial en vuestra santa ciudad, lo creo, lo confieso y lo siento. En el fondo aspiramos a lo mismo: la unidad de la Iglesia de Nuestro Señor Jesucristo, tal como Él mismo, el Señor Soberano la entiende”

Este testimonio nos sirve para establecer los límites de la presente exposición.
La devoción de María en Rusia pertenece al patrimonio común de todos los cristianos.

En segundo lugar, Rusia recibió el culto y la piedad mariana de la Iglesia Bizantina.

En tercer lugar, esa devoción tiene algunas notas propias.

Para justificar estas afirmaciones, basta con asomarse a la liturgia bizantina.
“Alégrate corona de los dogmas, tú has dado a luz al Hijo sin padre, ese Hijo divino nacido del Padre sin madre”

A la Paternidad del Padre en lo divino, corresponde la maternidad de la Teotokos en lo humano figura la maternidad divina de la Iglesia. Maternidad divina y Asunción forman los extremos de un arco luminoso, en el que los misterios marianos- y de la humanidad entera- se van entrelazando.
Los títulos que la liturgia bizantina da a María son como un resumen de esos misterios.
“primicia del Reino” “Puerta del Cielo”  “Cielo” “Templo de la Divinidad” “la que borra los lindes del pecado.”

“Ella es el doma vivo, la verdad sobre la criatura realizada. La asunción cierra las puertas de la muerte, el sello de la Teotokos es puesto sobre la nada: desde arriba la nada es sellada por el Dios-Hombre y desde abajo por la primera creatura resucitada.” (Evdokinov) Podríamos prolongar las citas sobre la Santísima virgen María con las cuales está impregnada la liturgia de la Iglesia Ortodoxa Rusa, pero para el trabajo que nos ocupa bastan estas pues considero que son suficientes para definir el auténtico espíritu ruso desde San Vladimir hasta el momento presente.

CAP. III LA PRUEBA DE FUEGO

Los enemigos de lo sobrenatural no ignoraron lo que este espíritu ruso encerraba, pero tampoco descubrieron su profundidad, quizá la prueba más grande a que fue sometida la nación rusa es la del COMUNISMO ATEO que sin piedad se lanzó sobre todos los estratos sociales en especial el obrero y el campesino en donde se mantenía esta filial devoción a la Santísima virgen María

Antes de continuar conviene aclarar que este ataque contra la devoción de los rusos nació FUERA de la órbita rusa y fue OCCIDENTE Estados Unidos y posteriormente Inglaterra quienes la propiciaron o auspiciaron, con todo podemos afirmar sin temor a equivocarnos que fue la masonería judía la que propicio la desaparición de las dinastías zaristas o del Imperio Zarista dando lugar a un gobierno totalitarista y déspota.

La caída de una nación como Rusia en el comunismo ateo no se dió de la noche a la mañana sino que fue un proceso en donde se involucran indirectamente los malos gobiernos zaristas o las políticas anti populares que llevan a la nación a un estado de descontento el cual, por desgracia, fue aprovechado por los enemigos de la nación.

El antecedente más mediático que a su vez es la causa de las causas, según el Sr. Alberto Falcionelli (Manual Histórico de Sovietología),  “radica en las reformas llevadas a cabo por el emperador Alejandro II – El Zar Libertador- entre 1861 y 1868; yo creo incluso que es la causa mediata fundamental y que de ella dimana todo lo que ha venido a continuación. Entiéndase bien no se quiere sostener o decir que el emperador haya tenido responsabilidad alguna  en ese “todo lo que ha venido a continuación”. Solamente se dice y se sostiene que en razón del espíritu con que fueron acogida, sobre todo de la resistencia a que dieron lugar en ciertos sectores de la sociedad rusa, estas reformas abrieron el paso a la disidencia y oposición  que rompieron las compuertas a la subversión, el terrorismo y la revolución.” 

 Siendo este el inicio de lo que posteriormente se le dio el nombre de sovietología y cambiara su nombre de Rusia a La Unión Soviética, pero aun así Rusia no dejo su nombre.

En el año 1905 Rusia se ve envuelta en revueltas que el Zar Nicolás II no puede sofocar porque no cuenta con el ejercito quien se encontraba en guerra contra Japón y la policía era insuficiente para cortar de tajo con estas revueltas de corte marxista- leninista. Cuando se quiere utilizar al ejército en 1917 ya es tarde. 

La revolución comunista de ya había ganado la partida contra el Zar Nicolás II. Lo que sigue es una matanza atroz contra las facciones que no colaboraron con el movimiento comunista incluyendo a la Iglesia Ortodoxa que fue el principal blanco puesto que sus enemigos no eran otros que los Judíos como lo demuestra fehaciente-mente el libro “Complot contra la Iglesia” de cuya obra solo extraemos aquello que compete a la Iglesia Ortodoxa Rusa: 

“Murieron veintiocho Obispos, 1,219 sacerdotes” ya no hablemos de los feligreses porque toda cantidad que se mencione de ellos es inexacta entre obreros y campesinos. Con esta inhumana cacería se pensó en dar un golpe demoledor a los ortodoxos rusos, pero no fue así.

Todo esto acontecía paralelamente a las apariciones de Nuestra Señora en Fátima que concluyeron precisamente el mismo mes en que la revolución bolchevique ocupo el poder en Rusia. Desde ese momento se sucedieron persecuciones atroces contra el clero y los fieles ortodoxos llevadas a cabo aun por los propios líderes de tal revolución bolchevique como Lenin y troski, con el famoso tren de la muerte, y después José Stalin quien, a pesar de los pesares, pactó una tregua con ellos y, además, pidió la colaboración del clero para que acompañara en la II guerra mundial, a sus 350 brigadas que contaban con muchos rusos practicantes, a cambio les prometió que, al fin de la campaña, abriría cinco santuarios más famosos en todo Rusia, palabra que cumplió. De esta manera el pueblo ruso tenía ya oficialmente cinco santuarios en donde manifestar su fe aunque fuesen estrechamente vigilados por el líder en turno.

No cabe duda que la consigna primera y principal, por no decir la esencia, del marxismo-leninismo o también llamado “socialismo práctico” es la lucha antirreligiosa que consiste en la erradicación de todo rastro de religiosidad. No tan solo la guerra contra las sectas sino principalmente contra la Iglesia Ortodoxa, que es su principal enemiga y que es la más numerosa dentro del territorio ruso, esta lucha se ha asumido como el signo de una verdadera empresa contra Dios mismo. Cierto es que, durante varios años, las iglesias se mantuvieron desiertas pues la autoridad eclesiástica había ordenado a los fieles que no se empeñaran en buscar el martirio, salvo en caso de absoluta necesidad para la salvación de su alma a pesar del “concordato”. 

Con todo esto en 1967 se hizo un censo o “investigación sociológica” que arrojó como resultado 50 millones de rusos, ucranianos y de bielorrusos se creían ortodoxos creyentes ya que no todos practicaban por falta de sacerdotes o en razón de “circunstancias exteriores a su voluntad.” Esto causó un verdadero espanto en la Nomenklatura y el especialista en asuntos religiosos del comité central Leonid Iliichev recibió consignas drásticas de erradicación. También se había descubierto, en efecto, que no pocos miembros del partido comunista hacían bautizar a sus hijos, intentaban casarse religiosamente y pedían consuelo religioso en articulo mortis. A este panorama desalentador de por sí, habrá que agregar a unos quince millones de musulmanes, que frecuentan la mezquita aun cuando se apuntan en el Comité Central o actúan como primeros secretarios del partido comunista.

En 1986 comienza la caída de la Unión Socialista de Repúblicas Soviéticas más conocida por (U. R. S. S.) PERO NO DEL COMUNISMO COMO TAL, como muchos contemporáneos piensan e incluso afirman. Y en 1991 se da la transición de la sovietología como término político, pero NO DE LA POLITICA COMUNISTA (de la cual hablaremos más abajo) como nos quieren hacer creer. 

Ahora bien, ¿como en medio de este vaivén de la Unión Soviética La Iglesia Ortodoxa se mantuvo incólume ante sus enemigos? Sí, Gracias a una profunda conciencia nacional, fruto de aquella sincera conversión al catolicismo. El pueblo ruso, que proviene de una fuente genuina religiosa y que sigue alimentando las almas sin agotarse jamás, continua adelante. Debemos concluir necesariamente que sin la intervención de la reina del cielo, a quien ellos le tienen una tierna devoción, no los abandonó nunca y que, conserva y mantiene su devoción. 

Ahora, que Nuestra Señora, a pesar del cisma, los siga sosteniendo y que ese mismo deseo tanto de Nuestra Señora como de ellos, de convertirse a la fe católica, es el resultado de una mención especial por la cual Nuestra Señora en Fátima los haya mencionado señaladamente y nos pidiera, por medio de las oraciones, sacrificios y penitencias la conversión de esta gran Nación. Si, por desgracia, somos ingratos esta misma nación está sobre nuestras cabezas como la espada de Damocles, en donde se nos presenta no solo como un castigo sino como la iniciadora de una gran catástrofe mundial que puede terminar con las tres cuartas partes de la humanidad.


LA TRANSICIÓN 1991

En este año tienen especial importancia varios acontecimientos muy importantes:

La derrota desastrosa de la Unión Soviética en Afganistán, en la cual tuvo mucha participación Estados Unidos quien apoyo decididamente a los Talibanes, recordemos este antecedente porque esa será y es en la actualidad su forma de actuar que no quieren colaborar con sus intereses, que la forzó a retirar sus tropas del frente.
El 9 de Noviembre de 1989, después de varias manifestaciones en Alemania Oriental, es destruido el muro que dividía a las dos Alemanias y con ella cayo el bloque del este.




En 1985 Mikail Gorvachov es nombrado presidente de la Unión Soviética, sus impopulares medidas de gobierno unidas a un sistema colapsado llevaron a que en el año 1989 se llevara a cabo un referéndum donde el 78% de la población optó por el “SI” a la continuidad de la Unión Soviética. Pero con el tratado de Belovesh (acuerdo internacional firmado el 8 de diciembre de 1991 por los presidentes de Rusia, Ucrania y Bielorrusia; Boris Yeltsin, Leonid kravchuk y Stanislav Shushkievich) en la reserva natural de Belavezhskaya Pushcha. Declararon la disolución de la URSS y se estableció en su lugar la Comunidad de Estados Independientes más conocida como C.E.I el acuerdo se realizó a pesar de que en el mes de marzo la población voto por un SI (78%) a la conservación de la URSS. De esta forma la URSS se disolvió de facto.



 El 18 de agosto de 1991 se produjo un intento de golpe de Estado militar de tendencia involucionista en manos de un grupo de altos funcionarios del PCUS y del gobierno. Este intento fue detenido por la fuerza del movimiento encabezado por Boris Yeltsin quien, después del fracasado golpe de Estado, tomó la decisión de ilegalizar el PCUS y de decretar la nulidad de la anexión de las repúblicas del báltico. Cada vez más debilitado políticamente, sobre todo a raíz de la acción política del presidente de la Federación Rusa, Mijaíl Gorbachov, tuvo que dimitir de su cargo de Secretario General del PCUS y disolver al Comité Central. El 25 de diciembre de 1991 se disolvió oficialmente la Unión Soviética y, como consecuencia de la negativa de los presidentes de las Repúblicas de la Comunidad (CEI) de reconocer los órganos de poder central, optó por dimitir a su cargo de presidente. Y desde ese momento cayó definitivamente la U.R.S.S.



Con la entrada al poder de Boris Yeltsin dió inicio la Federación Rusa mas en todos estos acontecimientos de carácter político la Iglesia Ortodoxa continuó hasta nuestros tiempos sujeta al poder en turno que NO ES DEMOCRATICO porque esta nación nunca supo que era un gobierno “democrático”  se le mire por donde se le mire pues de un gobierno zarista paso de golpe a un gobierno totalitario y déspota como lo fue el comunismo. 

Finalmente quienes ahora gobiernan NO SON NI SERAN DEMOCRATICOS porque nacieron bajo un gobierno que es todo lo contrario por donde no se le pueden pedir “peras al olmo”.  Es muy interesante saber cómo se dio este giro de la política rusa en un momento en el que, Boris Yeltsin enfrenta, además de su afición al bebidas embriagantes, una crisis económica que amenazaba con sumir a Rusia en una crisis sin precedentes, cercado por denuncias de corrupción, y por una salud débil decide nombrar como sucesor a Vladimir Putin, estas son sus memorables palabras y, a la vez, una especie de augurio: “Y ahora he decidido ofrecerles el nombre del hombre que, a mis ojos, es capaz de consolidar nuestra sociedad Vladimir Vladimirovich Putin”.




Que se puede decir de Vladimir Putin, su vida ha sido muy hermética poco se sabe de él (si quien lee esto sabe más cosas que las que aquí se dirán, por favor mándelas a este sitio) Con todo bueno es saber algo, he aquí ese algo de su vida:


Putin nació el 7 de octubre de 1952 en Leningrado, RSFSR, URSS (ahora San Petersburgo, Federación Rusa), en el seno de una familia de clase media baja, hijo de Vladímir Spiridónovich Putin (1911-1999), un antiguo oficial de la Marina Soviética, quien fue condecorado por su actuación en la defensa de la ciudad de Leningrado contra el ejército alemán durante la segunda guerra mundial y María Ivánovna Pútina (1911–1998), trabajadora de una fábrica. Sus dos hermanos mayores, nacidos en la década de los años 1930, fallecieron; el primero a los pocos meses de nacer, y el segundo de difteria durante el Asedio de Leningrado. A los 16 años tocó la puerta del cuartel general de la temida K. G. B. en San Petersburgo (antes Leningrado) solicitando pertenecer a la institución, pero se le contesto que la K. G.B. por cuenta propia no decidía a quien y cuando reclutar.


En 1970 ingresa en la Facultad de Derecho de la Universidad Estatal de Leningrado, de donde egresa con honores en 1975 con una tesis acerca de la política de Estados Unidos en África a sus 23 años termino su carrera de abogado 1975) y fue reclutado por el KGB y después de graduarse, enviado a su Escuela 401, localizada en el barrio peterburgués de Ojta, donde ese mismo año de 1975 terminó unos cursos para agentes operativos y obtuvo el grado de oficial (teniente de Justicia). Trabajó en el contraespionaje en la filial leningradense del KGB y en 1979 hizo en Moscú un curso de capacitación de seis meses, después de lo cual regresó a su ciudad natal. Cinco años más tarde, ya con el grado de mayor de Justicia, retornó a la capital rusa, esta vez para estudiar durante un año —con el apellido falso de Plátov— en el Instituto Andrópov del KGB (hoy, Academia de Espionaje). En 1985, el año en que terminó sus estudios en la Academia de Espionaje, fue enviado a República Democrática Alemana, donde sirvió en Dresde, pero tras la Caída del Muro de Berlín, y el comienzo de la Reunificación Alemana, fue llamado de regreso a la Unión Soviética y destinado a su alma máter como asesor de asuntos exteriores del rector, Stanislav Merkúriev.  Fue este quien lo contactó con Sobchak, quien se convertiría en su mentor político.

Este fue su discurso cuando tomo interinamente la presidencia  de la república en 1999 y esta misma retorica con matices más duros, como se verá más delante:


"Necesitamos terminar con las revoluciones que se organizan de forma que nadie puede pueda ser rico, pero lo que necesita el país en este momento son reformas para que nadie pueda ser pobre. No obstante eso, desafortunadamente, se está volviendo más complicado cada día. No existe eso de un Estado prospero con una población empobrecida".


"Necesitamos terminar las revoluciones que se organizan de forma. El instrumento más importante y la mayor prioridad del gobierno es la seguridad alimentaria. Nosotros proveeremos asistencia al sector agrario y en el análisis final para millones de campesinos que tienen solo una preocupación: alimentar al país con productos rusos de calidad".


"La integridad territorial de Rusia (incluirá Ucrania que históricamente es mas rusa que occidental) no está sujeta a negociación. Ni especialmente, al chantaje (actualmente de occidente y de EUA). Seremos duros con cualquiera que viole nuestra soberanía con todas las vías legales con que disponemos (incluyendo la guerra como sucedió con Chechenia, Osetia del Sur y actualmente Crimea".

 (¿Seguirán las ciudades del este de Ucrania?) Todo parece posible.)


"Rusia ha sido una potencia durante siglos (quien realmente quiera interiorizarse de eso tendrá que recurrir necesariamente a la historia de Rusia desde que esta se formó como nación en el año 980 D. C.)"

(Y sigue siéndolo hoy más que nunca). "Siempre ha tenido legítimas aéreas de interés fuera, tanto en los países ex soviéticos (por ahora se remarcan mas estas palabras por la situación en Ucrania uno de los países ex soviéticos donde en la actualidad reina el caos provocado por Occidente unido a Estados Unidos) como mas allá. No vamos a bajar la guardia a este respecto ni vamos a permitir que se ignore nuestra opinión". 

Ciertamente que, en ese momento no se tomaron en cuenta estas palabras porque tanto Occidente como Estados Unidos tenían un concepto muy inferior sobre el ejército ruso y este cambió drásticamente en la Guerra contra Georgia en 2008 (mas adelante viene un relato muy detallado sobre este acontecimiento, se los recomiendo vivamente aunque esté un poco largo).


Vladimir Putin empezaba su mandato de un año con retos muy importantes y al parecer difíciles de superar; la guerra con Chechenia que ya no era la primera sino la segunda  en su historia como nación, donde por primera vez muestra tal cual es el nuevo ejército ruso, he aquí lo que realmente sucedió en Chechenia bajo la presidencia interina de Vladimir Putin: “La posición del Kremlin se alinea con la del estado mayor militar: Chechenia debe permanecer bajo la égida rusa a cualquier precio. Para ello los generales federales desean establecer una zona de seguridad al norte de la república secesionista que comprende el trazado del oleoducto Bakú-Novorossisk.




La implementación de la estrategia militar escogida por el Kremlin es la imagen de los que la elaboraron: implacable, sistemática y brutal. En nombre de intereses geopolíticos legítimos, el ejército federal dará pruebas de un inaudito salvajismo en los combates. En el campo de batalla, la política extremista de Putin se manifiesta mediante el bombardeo intensivo a la ciudad de Grozni, lo que según Jean Radvany, profesor en el INALCO, es un «medio terrible de dar una demostración de eficacia cuando los rusos, desde hace varios años, eran extremadamente sensibles a la debilidad de su ejército y su Estado». 

“Se trata de un elemento decisivo para asegurar la popularidad del presidente interino, la cual necesita con vistas a las elecciones presidenciales de marzo de 2000. El contexto le es favorable: las críticas de Occidente garantizan la unidad de la población tras el jefe de Estado, fenómeno amplificado por la oposición de la opinión pública rusa a la intervención de la OTAN en Serbia, ocurrida en la primavera de 1999. Sin embargo, la ofensiva militar está lejos de ser un éxito: para avanzar en Grozni las tropas federales se ven obligadas a destruir barrios enteros al costo de terribles pérdidas humanas. 

Grozni se convierte poco a poco en una ciudad fantasma, cubierta de cadáveres y abandonada por sus sobrevivientes que no tienen alternativa: o el exilio en los campos de refugiados de Ingushetia, o la lucha armada desde las montañas vecinas a partir de donde lanzan mortíferos ataques. Según las evaluaciones de enero de 2000 «más de un tercio de la población de Chechenia ha sido expulsada de sus hogares y ha tenido que refugiarse en Ingushetia, donde Moscú ha impedido a las organizaciones internacionales (con excepción del Alto Comisionado para los Refugiados y la Cruz Roja) acudir en ayuda de unas 250 000 personas». Estos elementos del contexto geopolítico global son esenciales para comprender las razones del empeño masivo del ejército federal y su estrategia de llevar la situación hasta el extremo en el territorio checheno, donde la violencia, con un balance muy negativo para los chechenos (las cifras adelantadas por los dirigentes independentistas son de alrededor de 100 mil muertos), no está sólo vinculada a la determinación del Kremlin de no abandonar nunca el territorio. Es también una respuesta a la inesperada resistencia que encontró el ejército en su camino. Contrariamente al primer conflicto, la segunda guerra de Chechenia estuvo mucho mejor preparada por la parte rusa y los soldados mucho mejor equipados.

Especialmente los bombardeos aéreos destruyeron más blancos durante los diez primeros días de la ofensiva que durante los dos años de guerra anteriores, sin embargo, las milicias chechenas lograron rápidamente encontrar el equipamiento necesario para contrarrestar la ofensiva. De forma singular, los «hombres de las montañas», como se llaman a sí mismos los chechenos, tuvieron en su poder, a partir de enero de 2000, radares y baterías antiaéreas sofisticadas que les permitieron, contra todas las expectativas, resistir a las tropas federales. Ninguna potencia vecina pudo suministrar este equipamiento por temor a represalias rusas, de modo que el apoyo a la resistencia chechena hay que buscarlo en otra parte. 




¿POR QUÉ AUN NO SE HA CONSAGRADO RUSIA AL INMACULADO CORAZÓN? 
LAS CONSECUENCIAS.

Cuantos no quisiéramos que esta pesadilla termine de una vez, dormirnos y al siguiente día nos digan“Rusia ya fue consagrada al inmaculado corazón o  Rusia ya se convirtió al catolicismo,” Pero la triste realidad golpea nuestros más íntimos deseos. Realidad que se confirma en virtud de la relación causa efecto hoy por hoy son incompatibles, juzgue quien esto lee:

No se ha dejado de ofender a Dios como lo pedía Nuestra Señora en Fátima y esto no solo no se ha cumplido sino todo lo contrario asistimos a un lamentable espectáculo en el cual “Se ha olvidado la Santa Fe en Dios”, cada individuo querrá guiarse por sí mismo y ser superior a sus semejantes. Se abolirán los poderes civiles y eclesiásticos; todo orden y justicia serán pisoteados; no se verán más que homicidios, odio, discordia, envidia y mentira sin amor por la patria y por la familia” (revelaciones de Nuestra Señora de la Salette a sus videntes 1846) afirmando esta sentencia San Pablo a san Timoteo cuando le escribe: 

“Has de saber que en los últimos días sobrevendrán tiempos difíciles. Porque los hombres serán amadores de sí mismos y del dinero, jactanciosos, soberbios, maldicientes, desobedientes a sus padres, desleales, calumniadores, incontinentes, despiadados, enemigos de todo lo bueno, traidores, temerarios, hinchados, amadores de los placeres más que de Dios, tendrán ciertamente apariencia de piedad, mas negando lo que es su fuerza…” (II a Timoteo III v. 1-4) y la razón de todo esto está o es consecuencia de los pecados de los hombres, en el mismo secreto se señala incluso la complicidad de sacerdotes, de religiosos y personas consagradas a Dios quienes se han apartado del camino que lleva a la salvación lo cual, desafortunadamente es una triste realidad de la cual nosotros somos testigos que no podemos ni ocultar ni decir lo contrario porque los hechos nos desbordan y todo se origina por NO HABER REZADO lo suficientemente por ellos y ahora Satanás ha segado sus inteligencias como lo ha hecho en la mayoría de las sociedades y familias.

Cuando la Iglesia aun estaba Unida a lo sobrenatural, es decir, era católica con toda propiedad pudo y debió haberse consagrado Rusia, pero eso no aconteció. ¿Por qué?  Misterio.

Si a este segundo punto añadimos el más grave que es LA PÉRDIDA DE LA FE por parte de Roma lo cual también cae sobre nosotros como una horrible calamidad.

Entonces qué podemos esperar cuando el mismo pontífice Juan XXIII en 1960 año en que debía ser revelado, dio esta respuesta“Dada la gravedad del contenido, para no provocar a la potencia mundial comunista a tomar ciertas determinaciones, mis predecesores en el oficio de Pedro, HAN PREFERIDO DIPLOMATICAMENTE APLAZAR SU PUBLICACION. Por otra parte, a todos los cristianos puede serles suficiente saber esto: si existe un mensaje en que está escrito que los océanos inundaran partes enteras de la tierra, que de un momento a otro millones de hombres perecerán, no es el caso de andar gritando que se divulgue tal mensaje. Muchos quieren saber solo por curiosidad y por gusto sensacionalista, pero olvidan que el saber comporta una responsabilidad…” 

Pero sin embargo no se detuvo en hacer dos copias de tal secreto para enviar una al premier ruso Nikita Crushev y a John F. Kennedy presidente de los Estados Unidos ya que en ese momento se incremento mucho, en ambos países, la construcción de armamento sofisticado capaz de alterar el orden Mundial, después de esto “dejaron los proyectos armamentísticos y bélicos para otro momento. Lo más curioso del caso fue la aparición en 1963, de un “extracto” del tercer secreto en el periódico “Nueva Europa” en Alemania Occidental, ¿será este el que mando Juan XXIII envió a los dos mandatarios? He aquí su contenido:


“SOBRE TODA LA HUMANIDAD VENDRA UN GRAN CASTIGO, MAS NO AHORA NI MAÑANA SINI EN LA SEGUNDA MITAD DEL SIGLO XX. Lo que ya di a conocer en la Salette por medio de los niños Melania y Maximino, yo lo repito hoy día para ti. La humanidad no ha cambiado como Dios lo esperaba. La humanidad ha profanado y hollado con los pies el don que le ha sido dado. En ningún sitio reina el orden. Satanás ha llegado hasta los más altos puestos y determina la marcha de los acontecimientos. Logrará introducirse hasta los más altos puestos de la Iglesia. Conseguirá seducir los espíritus de los más grandes sabios que inventaran armas con las cuales podrá aniquilar la mitad de la humanidad en pocos minutos. Someterá a los poderosos de los pueblos a su imperio y los llevara a la fabricación en masa de esas armas. Si la humanidad no lo impide, me veré obligada a dejar caer el brazo de mi Hijo. 


Si los que están a la cabeza del mundo y de la Iglesia no se oponen a estos manejos. Lo haré yo y rogaré a Dios, mi Padre, para hacer venir sobre los hombres  su JUSTICIA. Y entonces castigará mucho más severamente que cuando lo hizo en el DILUVIO. Y los grandes y poderosos perecerán del mismo modo que los pequeños y débiles.


Pero también para la Iglesia vendrá tiempo de muy duras pruebas. LOS CARDENALES SE OPONDRAN A LOS CARDENALES LOS OBISPOS CONTRA LOS OBISPOS. Satanás se introducirá en medio de sus filas. En Roma misma habrá grandes cambios lo que esté podrido se cae y lo que se cae no debe mantenerse más. La Iglesia será oscurecida y el mundo precipitado en una gran confusión. La gran guerra vendrá en la segunda mitad del siglo XX. Fuego y humo caerá del Cielo y las aguas de los océanos se transformaran en vapor, lanzando sus espumas hasta el cielo y todo lo que esté en pie se hundirá. 

Millones y millones de hombres morirán de hora en hora, y los que queden vivos en aquellos instantes envidiaran a los que están muertos. Habrá tribulaciones en todas partes y a donde se dirija la mirada, miseria sobre toda la tierra y desolación en todos los países. He aquí que el tiempo se aproxima cada día y el abismo se profundiza cada día más, y no hay otra salida. Los buenos morirán con los malvados, los mayores con los pequeños, los príncipes de la Iglesia con los feligreses, los soberanos del mundo con sus pueblos; por todas partes reinara la muerte, levantada a su triunfo por los hombre extraviados, por los lacayos de Satanás, que serán los únicos soberanos sobre la tierra. Este será un tiempo que no esperara ningún Rey ni Emperador, ni Cardenal, ni Obispo, y vendrá cuando sea justamente el momento, según designios de mi Padre, para castigar y vengar. Posteriormente, cuando los que sobrevivan a todo estén aun con vida, se invocara de nuevo a Dios y su magnificencia, y se servirá de nuevo a Dios como los tiempos anteriores a la perversión del mundo. 


Yo llamo a todos los verdaderos imitadores de mi Hijo Jesucristo, a todos los verdaderos cristianos, A LOS APOSTOLES DE LOS ULTIMOS TIEMPOS. El tiempo de los tiempos llega y el fin de los fines, si la humanidad no se convierte y si esa conversión no viene de lo alto, de los dirigentes del mundo y los dirigente de la Iglesia. Pero que desgracia si esta conversión no llega y si todo queda tal como esta o llega a ser peor todavía. Vete hija mía y anúncialo. Yo estaré siempre a tu lado ayudándote”. 


Ante este panorama, podríamos afirmar sin temor a equivocarnos que, ¿Rusia ya se convirtió? y si se convirtió, como muchos lo quisieran, a ¿qué religión se convirtió, a la católica? esta es la que brilla por su ausencia en la misma Roma en virtud de su pérdida de Fe, ¿a la Iglesia modernista cloaca de todas las herejías y errores? Lo dudo. Preferible es, aunque no lo creamos, que permanezca en su fe ortodoxa marcada con el cisma a exponer y en consecuencia perder todo su depósito ortodoxo. Porque de ella aun la misma Iglesia otrora Católica decía por boca de del Cardenal Tisserant en el congreso mariano de Ottawa:




“Tenemos toda razón para creer que nuestra amada Madre es abogada del pueblo ruso. El pueblo de Rusia esta entregado al culto de la Madre de Dios de una forma especial, culto que se ha mantenido inalterable durante 30 años de ateísmo en Rusia. El icono de la Santísima Virgen María ha conservado su lugar de honor.”


Cuando se habla de la conversión de un pueblo a la fe se incluye también a sus gobernantes y en este caso la cúpula del gobierno ruso no da indicios de conversión alguna, lo mismo pasa con la parte religiosa como prueba de ello tenemos que ningún pontífice de la Iglesia Católica y menos de la modernista non han pisado suelo ruso en muchos años y no se por cuantos más esta visita tan ansiada se prolongará.







CAPITULO V: 
LA PAZ VERDADERA ¿POR QUE LA QUIERE DIOS Y EL HOMBRE NO?

He aqui la voluntad divina que debe ser obedecida. Es claro que si Rusia hubiera sido convertida suficientemente a tiempo, como Dios y la Santísima Virgen pidieron, ya habría paz, o nosotros veríamos el cumplimiento de todos los terribles castigos que Nuestra Señora nos dijo que ocurrirían: 
la guerra, el hambre y la persecución de la Iglesia y del Santo Padre, la aniquilación de varias naciones y la esclavización de aquellas naciones que no fueron aniquiladas. 

Sólo la conversión de Rusia puede poner fin a los castigos que hoy nos afligen, e impedir aquellos otros castigos que nos enfrentarán en el futuro. La Hermana Lucía advirtió que Rusia sería usada por Dios para castigar al mundo entero, si antes no alcanzábamos la conversión de esa pobrecita NNecesitamos la conversión de Rusia, pero Dios ha determinado que esa conversión sólo vendrá a través de un único medio: la solemne Consagración de Rusia al Inmaculado Corazón de María. El fin de los castigos y la paz mundial, por lo tanto, dependen de ese acto.

Paz o castigo

En Fátima Nuestra Señora, refiriéndose a Ella misma bajo el título de Nuestra Señora del Rosario, dijo, “Sólo Ella os puede ayudar”. Ningún gobierno o institución ha logrado alcanzar cualquier clase de paz duradera para nuestro mundo desgarrado por la guerra. Eso es porque Dios ha determinado que la paz vendrá sólo por un medio: de manos de la Santísima Virgen María. Y sólo por nuestra obediencia a los simples pero profundos pedidos que Ella hizo en Fátima concederá la verdadera paz sobre la humanidad.
La Hermana Lucía preguntó a Nuestro Señor por qué El no convertía a Rusia sin que el Papa hiciera la Consagración. Él le contestó que quería que toda la Iglesia la reconociera como el Triunfo del Inmaculado Corazón de María; luego, como resultado de ese triunfo, Su Iglesia rendiría público homenaje al Inmaculado Corazón al lado de Su Sagrado Corazón.
La paz que Nuestra Señora prometió es la paz que Isaías profetizó en la Sagrada Escritura: “Y sucederá a lo postrero de los tiempos que el monte de la casa de Yave será consolidado por cabeza de los montes, y será ensalzado sobre los collados, y se apresurarán a él todas las gentes, y vendrán muchedumbres de pueblos, diciendo: Venid y subamos al monte de Yavé, a la casa del Dios de Jacob, y el nos enseñará sus caminos, e iremos por sus sendas, porque de Sión ha salido la Ley, y de Jerusalén la Palabra de Yavé…de sus espadas harán rejas de arado, y de sus lanzas hoces. No alzarán la espada gentes contra gentes, no se ejercitarán para la guerra” (Is. 2:2-4; cf. Mic. 4:1-3). Eso fue profetizado hace más de 2.500 años, y será realizado cuando el Inmaculado Corazón triunfe y reine.
Podemos juzgar por nosotros mismos si las espadas actualmente están arando los campos. Sólo en el año 2000, los Estados Unidos de América exportaron  USD 798 mil millones en armamentos a los países del Tercer Mundo. Ese es dinero que pudo haber ido a medicinas, a plantas de desalinización de aguas, y para alimentos y agricultura. Cuando tengamos la paz que Nuestra Señora traerá con el triunfo de Su Inmaculado Corazón, usaremos nuestros recursos para ayudar a la gente más que para dañarla.

Paz y conversión

Como explica San Agustín, la paz es la tranquilidad en el orden. Desde que Dios es el creador de los hombres, se sigue que la humanidad tendrá paz solo cuando se conforme al orden de la sociedad establecido por el Creador. Para tener paz verdadera y duradera entre los hombres, el hombre debe vivir una vida justa y pía, de acuerdo con la naturaleza que Dios le dio. La paz que Nuestra Señora predijo no consistirá hasta “que los hombres se traten mutuamente con urbanidad y cortesía, sino que es necesaria una paz que llegue al espíritu, los tranquilice e incline y disponga a los hombres a una mutua benevolencia fraternal. Y no hay semejante paz si no es la de Cristo” (Papa Pío XI, Ubi Arcano dei Consilio). “Él es nuestra paz,” declaró San Pablo (Ef. 2:14).

La paz que resultará de la Consagración de Rusia no será meramente la ausencia de guerra. Será la paz que resulte del reinado de Jesucristo entre los individuos, las familias y la sociedad como explicó el Papa Pío XI: “Porque Cristo [será] todo entre todos” (Col. 3: 11). El reinado social de Cristo será reconocido y vivido por todos. Ya que reina Jesucristo en la mente de los individuos, por sus doctrinas, reina en los corazones por la caridad, reina en toda la vida humana por la observancia de sus leyes y por la imitación de sus ejemplos. Reina también en la sociedad doméstica cuando, constituida por el sacramento del matrimonio cristiano, se conserva inviolada como una cosa sagrada, en que el poder de los padres sea un reflejo de la paternidad divina, de donde nace y toma el nombre; donde los hijos emulan la obediencia del Niño Jesús, y el modo todo de proceder hace recordar la santidad de la Familia de Nazaret.

Reina finalmente Jesucristo en la sociedad civil cuando, tributando en ella a Dios los supremos honores, se hacen derivar de él el origen y los derechos de la autoridad para que ni en el mandar falte norma ni en el obedecer obligación y dignidad, cuando además le es reconocido a la Iglesia el alto grado de dignidad en que fue colocada por su mismo autor, a saber, de sociedad perfecta, maestra y guía de las demás sociedades; es decir, tal que no disminuya la potestad de ellas -pues cada una en su orden es legítima-, sino que les comunique la conveniente perfección, como hace la gracia con la naturaleza; de modo que esas mismas sociedades sean a los hombres poderoso auxiliar para conseguir el fin supremo, que es la eterna felicidad, y con más seguridad provean a la prosperidad de los ciudadanos en esta vida mortal.
De todo lo cual resulta claro que no hay paz de Cristo sino en el reino de Cristo” (Ubi Arcano Dei Consilio).
Dios ha determinado que esa paz vendrá por medio de la Consagración de Rusia y del triunfo del Inmaculado Corazón de María. La paz que será el resultado de la Consagración de Rusia, por lo tanto, tendrá no sólo una dimensión política pero también llegará a ser la paz que fluye de una unidad de mentes, corazones y voluntades: una paz católica. Para usar la expresión de Pio XI, será “La paz de Cristo en el Reino de Cristo”.
El Dios Todopoderoso, de Quien deriva toda autoridad, ha ordenado que haya una autoridad universal espiritual, la Iglesia, y una autoridad temporal. Ambas reciben su autoridad de Él, por lo tanto estamos obligados a rendir homenaje a ambas: “Todos han de estar sometidos a las autoridades superiores” (Rom. 13:1). Despreciar la autoridad legítima es ilegal y rebelde“...quien resiste a la autoridad, resiste a la disposición de Dios, y los que la resisten se atraen sobre si la condenación” (Rom. 13: 2).
La Iglesia Católica explica que el sistema que Dios destina a la Iglesia y al Estado es que los dos obren de común acuerdo. El Papa Bonifacio VIII enseñó solemnemente que las dos espadas que San Pedro esgrimió (Lc. 22:38) fueron simbólicas de las dos espadas de la autoridad papal, en la esfera de lo espiritual y de lo temporal. “Más esta (la espiritual) ha de esgrimirse en favor de la Iglesia, aquella (la material) por la Iglesia misma. Una por mano del sacerdote, otra por mano del rey y de los soldados, si bien a indicación y consentimiento del sacerdote”. (Unam Sanctam, § 2, Dz. 468-469)



Como explicó el Papa León XIII:
“Dios ha repartido, por tanto, el gobierno del género humano entre dos poderes: el poder eclesiástico y el poder civil. El poder eclesiástico, puesto al frente de los intereses divinos. El poder civil, encargado de los intereses humanos. Ambas potestades son soberanas en su género. Cada una queda circunscrita dentro de ciertos límites, definidos por su propia naturaleza y por su fin próximo. De donde resulta como una esfera determinada, dentro de la cual cada poder ejercita iure propio su actividad. Pero como el sujeto pasivo de ambos poderes soberanos es uno mismo, y como por otra parte, puede suceder que un mismo asunto pertenezca, si bien bajo diferentes aspectos, a la competencia y jurisdicción de ambos poderes, es necesario que Dios, origen de uno y otro, haya establecido en su providencia un orden recto de composición entre las actividades respectivas de uno y otro poder. “...pues no hay autoridad sino bajo Dios; y las que hay, por Dios han sido establecidas,” (Rom. 13:1). Si así no fuere, sobrevendrían frecuentes motivos de lamentables conflictos, y muchas veces quedaría el hombre dudando, como el caminante ante una encrucijada, sin saber qué camino elegir, al verse solicitado por los mandatos contrarios de dos autoridades, a ninguna de las cuales puede, sin pecado, dejar de obedecer.

“Esta situación es totalmente contraria a la sabiduría y a la bondad de Dios, quien incluso en el mundo físico, de tan evidente inferioridad, ha equilibrado entre sí las fuerzas y las causas naturales con tan concentrada moderación y maravillosa armonía, que ni las unas impiden a las otras ni dejan todas de concurrir con exacta adecuación al fin total al que tiende el universo. Es necesario, por tanto, que entre ambas potestades exista una ordenada relación unitiva, comparable, no sin razón, a la que se da en el hombre entre el alma y el cuerpo. Para determinar la esencia y la medida de esta relación unitiva no hay, como hemos dicho, otro camino que examinar la naturaleza de cada uno de los dos poderes, teniendo en cuenta la excelencia y nobleza de sus fines respectivos. El poder civil tiene como fin próximo y principal el cuidado de las cosas temporales. El poder eclesiástico, en cambio, la adquisición de los bienes eternos. Así, todo lo que de alguna manera es sagrado en la vida humana, todo lo que pertenece a la salvación de las almas y al culto de Dios, sea por su propia naturaleza, sea en virtud del fin a que está referido, todo ello cae bajo el dominio y autoridad de la Iglesia. Pero las demás cosas que el régimen civil y político, en cuanto tal, abraza y comprende, es de justicia que queden sometidas a éste pues Jesucristo mandó expresamente que se dé al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios.” (Immortale Dei)