martes, 9 de enero de 2024

LA TRAVESÍA DE LOS SANTOS REYES (Sermón de Epifanía R.P. Rafael OSB)


 

" Quiero que reflexionen que el viaje que hicieron los tres  Santos Reyes es como  nuestro viaje aquí en la tierra rumbo al Cielo, es muy similar. Primero, la estrella representa un ángel, para nosotros representa la Fe que nos conduce a Nuestro Señor Jesucristo continuamente, a Su Corazón, a Su Voluntad, a Su presencia, hacia el Cielo. Así que tenemos que vivir como peregrinos todo el tiempo,  debemos estar listos a dejar todo si el la Voluntad de Dios. San Benito dice que lo más difícil de dejar atrás es nuestra propia voluntad, por eso es que la obediencia es la herramienta más poderosa. Por la obediencia, sabemos que estamos cumpliendo la Voluntad de Dios y dejamos de lado nuestra propia voluntad. En los Monasterios nos vamos a seguir la estrella, a seguir la Voluntad de Dios, porque sabemos que el principal enemigo somos nosotros mismos, nuestra propia voluntad. tanto que la regla de San Benito dice que debemos odiar nuestra propia voluntad. Es una de las sentencias más poderosas de la santa Regla. Es un privilegio estar bajo la obediencia de alguien. Hay que tener inteligencia y doctrina para cuando el superior o la autoridad nos dice algo y tenemos que ser capaces de discernir si es pecaminoso o no. Pues si es pecado no se obedece a esa autoridad, se obedecería a la siguiente autoridad que en nuestro caso sería nuestra Santa religión, los Apóstoles, los Mandamientos de Nuestro Señor Jesucristo.

Cuando los Santos Reyes perdieron la estrella y quedaron en obscuridad, buscaron consejo de Herodes y  cuando les dijeron ir a Belén, la estrella apareció de nuevo. Es otra lección: Dios nunca va a abandonarnos. La virtud de esperanza, nos obliga a confiar en Nuestro Señor, incluso en la obscuridad.

Este mundo ahora está realmente en obscuridad, por todos lados, y en cualquier tema. La gente se desanima, y busca consuelos y la estrella, que es la Fe, es sobrenatural. Así que aun cuando estamos en obscuridad, sabemos qué es lo que debemos hacer. "El justo vive de la Fe". Debemos ser fieles a Nuestro Señor y no buscar consolaciones fuera de la Voluntad de Dios.

Finalmente encontraron a Nuestro Señor. Antes de entrar a la casa, tuvieron que pedir permiso a San José para poder ver a Jesús y a María. Así que Dios usa la autoridad para dar Sus gracias. En un Monasterio, Dios da sus gracias a través del superior. En la Iglesia, Dios da Sus gracias a través del Papa, en el Cielos, Dios lo hace a través de la Santísima Virgen María. Los Santos Reyes vieron a Jesús y a María a través de San José. Dios Padre le delegó su autoridad a  San José.

En este mundo, ahora la gente quiere deshacerse de la autoridad, porque la principal bandera del Vaticano II y de la nueva religión es: libertad. Falsa libertad realmente, osea, libre de la Voluntad de Dios, liberalismo; incluso entre los tradicionalistas, dicen: es mi decisión! Es mi tiempo! Siendo que esto sería esclavitud, porque asegurar  mi voluntad y a mi mismo, es atarme yo mismo a algo humano, por lo tanto estoy atado y soy esclavo de las criaturas o de mi voluntad. Es por esto que tenemos que seguir el orden que Dios nos ha dado, que es siempre seguir Su Voluntad. Decir que tenemos que odiar nuestra propia voluntad suena muy duro. Pero es exactamente lo que tenemos que estar haciendo. Ir contra nosotros mismos. Porqué? Porque somos humanos, mi mente es humana, mi razonamiento es humano, y NO estamos aquí para seguir cosas humanas, estamos aquí para seguir cosas divinas, somos hijos de Dios. Esta es la razón por la cual tenemos que odiar nuestra propia voluntad. Por eso es que nos vamos a los Monasterios a seguir la voluntad de Dios. Nuestro Señor fue obediente hasta la muerte, y muerte de Cruz.

Otro punto a meditar es que después de que los Magos visitaron a Nuestro Señor, el Ángel les dijo que regresaran a casa. Orden muy crucificante, humanamente hablando, pues pasaron varios meses luchando por encontrar a Dios, el Rey de Reyes, el Rey de Israel,  Aquél que les iba a dar todo en el cielo y en la tierra, y si lo han encontrado ellos quieren estar ahí!

Eso mismo pasa cuando queremos Sacramentos, cuando queremos Sacramentos queremos a Dios, queremos recibirlo, queremos estar con Él, en la Santa Misa, en la Comunión! Pero miren la orden de Dios a través del Ángel: regresen a casa

Regresar a sus países, que son paganos, y 33 años después serán discípulos de Nuestro Señor. Esperar 33 años para volver a ver a Dios! Pero esa es la Voluntad de Dios y fue lo que hicieron.

Es lo que estamos haciendo ahora, para ser fieles a Nuestro Señor, siguiendo la estrella y haciendo Su Voluntad, no tenemos Sacramentos tan seguido, ni sacerdotes, pero amamos a Dios sobre todas las cosas, no tenemos Sacramentos que comprometen la Fe. Es claro que no es la voluntad de Dios que vayamos a esos lugares como la San Pio X o del indulto. Por eso es muy bonito el ejemplo de los Magos, lo habían encontrado y ahora tienen que regresar a casa.

Los planes de Dios son perfectos. Si quisiéramos hacer otra cosa según nuestro punto de vista, significaría que somos más sabios que Dios. Ese es el problema. Por eso la gente pierde la Fe, porque ven las cosas de manera humana. Un terremoto que mata miles de personas, porqué lo permite Dios? Están mirando las cosas de un punto de vista humano. Dios sabe lo que hace con cada alma, El tiene el control de todo. Para algunos es tiempo de sufrir, otro de morir, o de perder su casa, para que puedan recibir gracias, o no sabemos exactamente, pero Dios permite el mal para un bien mayor. Que no lo comprendemos, claro, no somos Dios, es normal que no lo entendamos.

Debemos ser humildes, si algo no comprendemos, nos sometemos. Obedecer siempre la Voluntad de Dios. Señor, que se haga siempre Tu Voluntad, cualquiera que sea, crucifixión, no tener sacramentos en varios años, lo que Dios decida, si tenemos que morir esta noche, vamos.

En este mundo apostata también estamos contaminados y pensamos a modo humano la mayoría de las veces. Porqué yo, porque ahora, porqué está persona, nunca se le hacen preguntas a Dios, sencillamente se acepta.

Dios mío, Tú sabes lo que haces! Tú eres sabio! Tú eres bueno, Tú eres misericordioso, Tú eres justo! Tú sabes lo que haces.

Esto es también a nivel sacerdotal.  El sacerdote es Cristo en la tierra. Si vamos a ser perseguidos o dejados solos,  calumniados o muertos Deo gratias, Dios nos puede reemplazar o hacer lo que Él quiera. Si no tenemos Obispo, tampoco importa. Es trabajo de Dios darnos un verdadero obispo, es trabajo de Dios, no debe preocuparnos. Cómo dice San Agustín: trabaja como si todo dependiera de ti, pero al mismo tiempo como si todo dependiera de Dios. Esperarlo todo de Dios.

Es el celo apostólico, tratar de convertir a las personas, de hablarles la verdad, de corregirlos, consolarlos, visitar a los enfermos, prisioneros, ayudar a todos en cualquier momento, incluso a expensas de mi salud. Pero tan pronto empecemos a vivir de modo humano todo se colapsa. Todo se colapsa, todo se tuerce, las gracias dejan de fluir y de repente estamos fuera de las órdenes de Dios Nuestro Señor y estamos en peligro, nosotros y también aquellos a nuestro alrededor. Los fariseos no entraban, ni dejaban entrar, y Nuestro Señor dijo, a menos que sean mejores que ellos no entrareis en el Reino de los Cielos.

Cómo un niño que tendría que ser mejor que su padre, es una tarea muy muy difícil. Así que cuando los líderes están tomando una dirección diferente de la de  la Voluntad de Dios, es un problema enorme, una gran preocupación y un gran peligro para cada uno de nosotros. Es por eso que estamos en esta lucha. Estamos aquí para ser crucificados como Nuestro Señor, con Nuestra Señora y llegar a ser mártires. Mártir significa ser testigos de Nuestro Señor, por Su amor, Su doctrina, Su justicia, Su misericordia, Su sabiduría, Él sabe lo que está haciendo.

Cuando Nuestra Señora de Guadalupe paró a Juan Diego quien iba en busca de Sacramentos le dijo: Juan Dieguito el más pequeño de mis hijos qué te preocupa? No estoy yo aquí que soy tu Madre? Hay algo que necesites aparte de Mí? Esa es también la pregunta para nosotros. Por eso no hay duda que esta es una batalla sobre la Fe, no de sacramentos, sacerdotes, obispos. La Fe es la que vence al demonio, al pecado, al enemigo, a nosotros mismos, al mundo, vence todo. San Pablo dice: si Dios está con nosotros, quien contra nosotros?  Qué hermoso, nuestra religión es hermosa. Dos o tres con Fe son suficientes para conquistar el mundo porque Dios está en nosotros.

Si seguimos caminando llegaremos al Cielo! Con los Santos y contemplando algún día el Rostro de Nuestra Señora. Enorme recompensa!!! Sigamos en esta soledad, con estos peligros pero estamos con Dios, con la Santísima Virgen y con San José. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

NdB: Viva Cristo Rey