martes, 7 de junio de 2016

NI LOS HEREJES (PROTESTANTES) NI CISMÁTICOS SON CATÓLICOS



!Si alguno viene a vosotros y no lleva esta doctrina, no lo recibáis en casa ni lo saludéis! (Tit 3,10-11 y II Jn 10-11)



 ERRORES DEL CONCILIO VATICANO II (SEXTA PARTE)

*Cualquier semejanza con lo enseñado por Francisco no es coincidencia. Francisco aplica al pie de la letra el herético Concilio Vaticano II. 

Errores sobre los herejes y cismáticos

Afirman los conciliares: “no pocas comunidades”, dieron en la herejía y el cisma por culpa de eclesiásticos católicos (…); pero que ahora “no pueden ser tenidos por responsables” de ese pecado (No obstante que se están nutriendo en las doctrinas propias de su secta… y se niegan a someterse a la doctrina revelada de Jesucristo y a la autoridad instituida por Él).

  (De ahí) la falsedad de la frase siguiente:
  “Sin embargo, justificados por la fe en el bautismo, (los hermanos separados) quedan incorporados a Cristo y, por tanto, reciben con todo derecho el nombre de cristianos”.

  (Ya que) Quienes quedan aquí “incorporados” a Cristo, a la Iglesia, son los católicos, no los herejes ni los cismáticos.

  La Lumen Gentium, afirma que el acervo de valores de los “hermanos separados”, comprende “muchos elementos de santificación y de verdad”: la palabra de Dios escrita, la vida de la gracia, la fe, la esperanza y la caridad y algunos dones interiores del Espíritu Santo y elementos visibles”.

  Preguntamos: ¿cómo pueden haberse conservado la “vida de la gracia” y las tres virtudes teologales en comunidades heréticas y cismáticas, rebeldes a la autoridad de la Iglesia única y legítima de Cristo (…) Además, qué posibilidades de “santificación”  y qué “verdades” se encierran en tales doctrinas y en el modo de vivir de esas sectas?

  (…) los llamados “hermanos separados” son tales precisamente por su rebeldía a la enseñanza de la Iglesia, con lo que resisten al Espíritu Santo, que no puede, en consecuencia, ni “unirse” a ellos; ni conferir a herejes o cismáticos la gracia del martirio por la fe verdadera, misma que no profesan pero a la que sí combaten. Los misioneros protestantes que fueren asesinados por ser misioneros no pueden considerarse mártires, es decir de la fe verdadera.

  (La nueva pastoral) Consiste en: “ofrecer al género humano la sincera colaboración … para lograr la fraternidad universal” (En lugar de convertirlo a Cristo);  “exhortar a los católicos para colaborar con los herejes y cismáticos, elaborando traducciones comunes de la Escritura Sagrada”; y “colaborar con los hermanos separados en un apostolado cristiano” a fin de, “reconocer y apreciar los tesoros de ellos, unirse en la oración en ciertas circunstancias especiales”.

  No pueden existir “valores” comunes. Se trata de una pastoral nueva… que enseña lo contrario respecto de los herejes: “Al sectario, después de una y otra amonestación, evítalo, considerando que está pervertido; … si alguno viene a vosotros y no lleva esta doctrina, no lo recibáis en casa ni lo saludéis… (Tit 3,10-11 y II Jn 10-11)

  El heresiarca Lutero destruyó todo lo que pudo del dogma y la moral católicos: negó el sacerdocio; corrompió la Escritura; echó por tierra la noción misma de la Iglesia; redujo los sacramentos de siete a dos, y éstos bastardeados; negó la transubstanciación y el significado propiciatorio del santo sacrificio; negó el purgatorio, la virginidad de María Santísima después del parto; escarneció el principio de la santidad, la virginidad y la castidad; admitió el divorcio; negó el libre arbitrio del hombre y el valor meritorio de las obras; fomentó el odio contra los cristianos, incitándolos, por añadidura, a la rebeldía contra el principio de autoridad.

   (…) consagraciones y ordenaciones de los anglicanos son nulas por defecto de forma y de intención. Lo declaró León XIII en 1896 con sentencia dogmática.

  Además, se difunde hoy entre los protestantes la presencia de las “sacerdotisas”, forma de neopaganismo… debido a la penetración del feminismo (…); se quiere instaurar esto también en la Iglesia Católica, que se ha vuelto “ecuménica”.

  … los protestantes quieren seguir la “palabra de Cristo” –dicen- (pero) no como católicos, es decir, no como la enseña la Iglesia Católica, sino según el principio falso del “libre examen”, … y lo que “les parezca verdad”, lo cual es herejía. (León X en 1520, Bula Exsurge Domine).

  Afirman los conciliares, que “cuantos creen en Dios,sea cual fuere su religión, escucharon siempre la manifestación de la voz de Dios en el lenguaje de la creación”. Nosotros sabemos que dichas religiones, no pueden ni redimir ni salvar a nadie.

  Dicen los herejes conciliares: “… que estas religiones… por más que discrepen en mucho de la Iglesia, … no pocas veces reflejan un destello de aquella Verdad que ilumina a todos los hombres”.(Que: “hay (algo) de santo y verdadero”. (¡!)

  Los documentos conciliares ordenan a los misioneros que deben descubrir (¡!)  “con gozo y respeto, las semillas de la palabra que en las antiguas culturas y religiones diversas Dios esparció con frecuencia…”. (Pretexto para dejar de lado la labor misionera).

  (Luego, se refiere al hinduismo, afirmando que en esta religión:)  “los hombres investigan el misterio divino y lo expresan mediante la inagotable fecundidad de los mitos y con los penetrantes esfuerzos de la filosofía, y buscan la liberación de las angustias de nuestra condición… meditando (¡!)”. Con estas aseveraciones, se induce al católico a considerar válida la mitología y la filosofía hindúes … (siendo que esta gente ignoran el concepto de la creación… y conciben a Dios como “una fuerza cósmica impersonal” (propia del monismo y panteísmo). 

Les falta, además, el concepto del alma individual y de lo que llamamos voluntad y libre arbitrio. (Adicionalmente hay algo peor): (…) la doctrina de la reencarnación que profesan es una concepción particularmente perversa; y la supuesta “ascesis” hindú no es más que una forma de epicureísmo para los brahamines, una búsqueda refinada y egoísta de una superior indiferencia espiritual para todo deseo, (…) (En tales condiciones) ¿Qué pueden aprender los católicos de bueno de tamaña concepción del mundo?

  En cuanto al budismo, que es una variante del hinduismo… el concilio pretende hacerlo aparecer con aspectos “buenos”; pero en realidad es una “metafísica de la nada”… “el yo se extingue totalmente para disolverse de manera anónima con el Todo y en el Uno”, ¡este es el “estado de perfecta liberación” o de “suprema iluminación” que el Vaticano II osó proponer  la atención y al respeto de los católicos! (…) los musulmanes no creen en la Santísima Trinidad; niegan la gracia, la divinidad de nuestro Señor Jesucristo, la encarnación, la redención, la muerte en la Cruz, la resurrección; en nuestros dogmas… el libre albedrío… etc. 

..Y los modernistas ¿no sostienen también herejías? El modernismo es el compendio de todas las herejías, condenado por San Pío X en 1907. La adhesión total, parcial o minúscula al Concilio Vaticano II es prueba de adhesión al modernismo. El modernismo no tiene parte en la Iglesia Católica, por lo tanto quienes lo profesan, defienden y sostienen están en herejía.